Aznar buscará pacto con los sindicatos, con los criterios de Maastricht como único limite

José María Aznar quiere conseguir un acuerdo con los sindicatos y los empresarios que le garantice la tranquilidad social durante la legislatura, una vez establecidas con los nacionalistas las bases para la estabilidad parlamentaria de su Gobierno. El pacto social será su principal empeño en las próximas semanas. Ministros ya confirmados del Gabinete y miembros de la ejecutiva del partido aseguran que existe voluntad política y que se va a hacer una apuesta fuerte por el acuerdo, aunque Aznar impondrá un límite, el cumplimiento de los criterios de convergencia europea.

Más que a una nueva reforma laboral, los populares aspiran a conseguir que sindicatos y empresarios pacten la interpretación de la anterior, siguiendo el modelo ensayado y frustrado hace pocas semanas en Cataluña. Los líderes sindicales, Antonio Gutiérrez y Cándido Méndez, esperan ser citados a mediados de la próxima semana, en torno al jueves, según indicó ayer el último.El equipo económico de los populares cree que la concertación social será difícil, pero no imposible. Por una parte, el cumplimiento de los criterios para llegar a la cita de la moneda única es "irrenunciable", según coinciden en señalar distintas fuentes de la dirección del PP, y obliga a aplicar una política restrictiva en los Presupuestos del Estado. Xabier Arzalluz, socio de Aznar para la investidura, ya advirtió el martes que la situación requerirá "cirugía dura".

Sin embargo, los populares observan factores favorables. El precio del dinero puede seguir bajando, tras la formación de un Gobierno con perspectivas de estabilidad, lo que facilitaría la inversión. Las lluvias permitirán reducir los costes de la producción de energía eléctrica y, sobre todo, garantizan un año de elevada producción agraria, factor éste que puede contribuir a un crecimiento económico importante.

Compromisos electorales

Aznar se comprometió durante la campaña electoral, con gran insistencia, a garantizar que no habrá recortes en las pensiones ni en la sanidad pública. Su argumento era que, al no estar en cuestión, de estas cosas ya no habrá que hablar con los sindicatos y podrá dedicarse la concertación social al objetivo prioritario, las fórmulas para crear empleo. Frente a las demandas de la patronal CEOE, Aznar aseguró también que no habría despido libre ni abaratamiento del mismo.Aunque con menos entusiasmo que en el caso del pacto con los nacionalistas, que era el precio de la investidura y la formación de Gobierno, el partido está dispuesto a respaldar el pacto social porque sabe que es la vía para una legislatura tranquila. Los compromisos de Aznar en la campaña parecen cerrar el paso a una nueva reforma laboral. El modelo por el que apuesta el PP es la definición conjunta entre patronal y sindicatos de las causas del despido objetivo, introducidas desde 1994.

Esta modalidad de despido, con 20 días de indemnización por año trabajado, apenas se utiliza por su indefinición. Los empresarios argumentan que ha resultado inoperante y que si se pactaran con claridad las causas del despido "objetivo" se crearía empleo, al reducirse la incertidumbre sobre su coste.

CC OO y UGT y la patronal catalana, Fomento, pactaron en marzo pasado un Acuerdo Interprofesional para que comisiones paritarias fueran precisando en los convenios colectivos las causas del despido " objetivo". A cambio, los sindicatos obtenían un compromiso para limitar el uso de las 17 modalidades de contratación temporal existentes.

Las centrales en Cataluña preferían este desarrollo pactado al llamado "contrato estable" defendido por CiU, en el que existiría libertad para pactar en cada caso la indemnización por despido, porque consideran que este procedimiento acabaría en la Iey de la selva".

"No habrá recortes"

La hostilidad de la CEOE y modificaciones introducidas a última hora por Fomento dieron al traste con la firma del pacto en Cataluña, que apoyó con mucho interés la Generalitat. Pese al fracaso en Cataluña, que los sindicatos atribuyeron a una apuesta de la patronal por una nueva reforma legal para abaratar el despido, los populares quieren desarrollar el mismo modelo de concertación entre patronal y sindicatos.Un dirigente muy próximo a Aznar lo califica como "monumento a la sensatez". También Rodrigo Rato apoyó la negociación entre sindicatos y empresarios en Cataluña durante las conversaciones con los partidos nacionalistas para cerrar el pacto político.

El presidente de la Comunidad de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, insistió ayer, en respuesta a las advertencias de las centrales sindicales durante el Primero de Mayo, en que los populares mantendrán sus compromisos electorales y "no habrá recortes" sociales. "Hay que modernizar", dijo, "el sistema de prestaciones, pero eso no significa un recorte en el gasto social, sino intentar que cueste menos".