Moscú admite que el plutonio hallado en Múnich procedía de Rusia
Las autoridades rusas han admitido que el plutonio altamente radiactivo introducido clandestinamente en Alemania en 1994 procedía de un reactor nuclear ruso, informó ayer Peter Hau smann, portavoz del Gobierno alemán. Hausmann indicó que los servicios secretos rusos enviaron al Ministerio de Justicia alemán un documento en el que reconocían que el plutonio había sido robado de una central rusa.
El portavoz no dió más detalles, pero la prensa alemana sugiere que el material radiactivo provenía de Obnisk, al suroeste de Moscú, donde se encuentra la central nuclear civil más antigua del mundo.
Los 363 gramos de plutonio 239 fueron aprehendidos en el aeropuerto de Múnich el 10 de agosto de 1994, en un vuelo de la compañía Lufthansa procedente de Moscú. El colombiano Justimano Torres y los epañoles Javier Bengoechea y Julián Oroz fueron condenados a penas de cárcel por este caso, que, supuso la mayor captura de plutonio realizada en el mundo.
La oposición alemana había acusado al servicio secreto alemán (BND) de haber montado todo el asunto para demostrar el peligro que supone el tráfico y circulación de este tipo de materiales procedentes de la extinta Unión Soviética. Según la revista Focus, las pruebas presentadas a la investigación parlamentaria de Bonn muestran que el BND oyó hablar por primera vez de contrabando de plutonio a su agente encubierto Rafa, el ex guardia civil español Rafael Ferreras, que fue el principal testigo en el llamado juicio del plutonio. Pero el documento ruso parece desmentir que el BND fuera el que creó el caso.
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