La primera nave que entrará en órbita de un asteroide partirá este mes hacia Eros

' Restos de la creación del sistema solar recorren la inmensidad espacial. Entre ello, hay rocas de varios centenares de kilómetros de diámetro que orbitan el Sol, en su mayoría en un cinturón situado entre Marte y Júpiter. Son los asteroides. Este mes comenzará un asalto a los enigmas que plantean estos cuerpos celestes con el lanzamiento de una nave espacial que será la primera de la historia destinada a entrar en órbita de un asteroide. La nave recorrerá en tres años 2.000 millones de kilómetros hasta Regar al asteroide Eros, en cuya órbita permanecerá durante un año.

Los asteroides se estudian para encontrar datos sobre la formación del sistema solar hace más de 4.000 millones de años, pero también recientemente se han asociado con catástrofes que mutilan planetas, como sugieren los cráteres encontrados en la Luna, Marte y la Tierra, y que quizás hicieron desaparecer los dinosaurios hace 65 millones de años. En la actualidad, algunos asteroides pasan muy cerca de la Tierra y otros cruzan su órbita.La sonda que será lanzada hacia Eros, que toma el nombre del dios griego del amor, desde cabo Cañaveral a mediados de mes, tiene el tamaño de un automóvil y transporta siete instrumentos. Su nombre es Near, acrónimo de Near Earth Asteroid Rendezvous. Su viaje será muy complejo, ya que el asteroide orbita el Sol con una inclinación de 10.8 grados sobre la eclíptica. Para ello, Near irá primero más allá de la órbita de Marte, para volver luego a la Tierra en enero de 1998 y obtener energía gravitacional del planeta para aumentar su velocidad y cambiar el plano de su órbita.

Cuando llegue a las cercanías de Eros, en enero de 1999, maniobrará hasta orbitar en marzo a unos 30 kilómetros de altura sobre la superficie del asteroide; quizá se acerque mucho más al final de su misión. Eros tiene dos veces el tamaño de la isla de Manhattan, y forma alargada. Pasa relativamente cerca de la Tierra en su paseo caótico a través del sistema solar.Fotos desde un coche

"Hemos pasado cerca de asteroides pero era como tomar fotos del cañón del Colorado desde la ventanilla de un coche", ha señalado Richard P.Binzel, del Massachusetts Institute of Technology. "Ahora nos pararemos, miraremos y estudiaremos uno en detalle. Creo qué la misión desafiará nuestra comprensión de los cuerpos pequeños y nos forzará a volver a estudiar cosas fundamentales una vez que nos veamos ante los datos detallados".,

Dadas las restricciones presupuestarias actuales en el espacio, la misión es importante, ya que es la primera de un nuevo tipo de exploraciones planetarias de bajo costo en las que se basa el futuro. La misión Galileo a Júpiter, lanzada hace seis años, costó 200.000 millones de pesetas, mientras que esta misión no llega a los 21.000 millones de pesetas.

Tan grandes son los cambios que el constructor y operdor de la nave no es la NASA. Buscando la competencia para ahorrar, el trabajo fue hecho por el laboratorio de Física Aplicada de la universidad John Hopkins, lo que convierte la misión en la primera de la NASA al espacio lejano que es llevada por un organismo externo. Los científicos y técnicos convirtieron en realidad el vehículo en solo dos años.

Con anterioridad ha habido vuelos cercanos a cuerpó1 celestes, pero nunca las naves no tripuladas se han situado en órbita. Hace 10 años, una flotilla de naves se acercó al cometa Halley hasta sólo 500 kilómetros de su núcleo incandescente. La nave Galileo, en su ruta a Júpiter, fotografié dos asteroides desde más de 1.000 kilómetros. En 1991 fue Gaspra y en 1993 Ida. Éste último resultó tener un satélite, Dactyl.

Eros fue observado por primera vez por telescopios en Alemania y Francia en 1898 y poco después fue reconocido como el primer asteroide que podría acercarse a Ja Tierra. Hoy, tras un siglo de vigilancia con telescopios y radar, se cree que este cuerpo rocoso tiene 40 kilómetros de largo y es el segundo en tamaño de los centenares de asteroides que pasan cerca de la Tierra. La composición de Eros es un enigma que refleja la confusión general sobre la naturaleza y origen de los asteroides. Near tiene por objetivo medir su tamaña, forma, volumen, masa, gravedad, estado de rotación, composición superficial, geología, morfología, textura, distribución de masas y campo magnético. The New York Times