Compañero y amigo
, Si se confirman las terribles noticias que llegan de Colombia habrá muerto un compañero y un amigo. Un buen compañero y un entrañable amigo. Vicente Zabala, periodista ejemplar, trabajador infatigable, inteligente y apasionado, tenía amigos en todas partes, dentro y fuera del ámbito taurino, porque encantaba su simpatía y transmitía una enorme humanidad.
Uno pudo compartir muchos días y muchas horas con Vicente Zabala, al hilo de las numerosas ferias, trotamundos ambos, de hotel en hotel, y era durante las sobremesas cuando compartíamos nuestras inquietudes, en las que Zabala vaciaba su afecto y se enternecía con el recuerdo de sus hijos.
Fue cronista de incuestionable solvencia; de ahí que los profesionales taurinos tuvieran como referencia permanente las opiniones, siempre directas y sinceras, que contenían sus crónicas. Y no sólo los profesionales. Su actitud firme en defensa de la fiesta, cimentada en un conocimiento profundo del toreo, consiguió promover intervenciones de la autoridad contra las corruptelas y contribuyó a enriquecer los conocimientos de gran número de aficionados.
Vicente Zabala ya hace mucho que se había convertido en un clásico; una institución dentro del periodismo y del mundo de los toros. Es, desde luego, irrepetible, y la tremenda conmoción por la tragedia, el dolor por la inesperada pérdida, no ocultan que su personalidad y su ejemplo van a ser inolvidables.