CUMBRE GASTRONÓMICA PARA UN BAUTIZO
Paul Bocuse, el general De Gaulle de la cocina francesa y mundial; Joël Robuchon, el estilista superestratosférico y moderno del parisianismo gastronómico, y otros seis chefs franceses y belgas, todos ellos portadores de las tres estrellas Michelín, que sólo entroniza a los más grandes en el podio más elevado de la historia del arte culinario, bautizaron la semana pasada, en las Bodegas Osborne, en el Puerto de Santa María, una nueva joya de la creación vinícola hispánica: el brandy Conde de Osborne. En el grupo figuraban también dos de las tres estrellas Michelín españolas: Benjamín Urdain (de Zalacaín, de Madrid) y Santi Santamaría (del Racó de Can Fabes, de San Celoni, Barcelona); el tercer Michelín español, Arzak, tuvo impedimentos mayores para estar presente. El nuevo brandy Conde de Osborne es una epopeya de los vinos de Jerez; el quid radica en un detalle simple y glorioso: está envejecido en botas (barricas) de envejecimiento de uno de los vinos generosos del mundo más a respetar: Pedro Ximénez.-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.