Hallado el gen que hace florecer los capullos

Dos grupos de científicos de Estados Unidos han encontrado, en el álamo y en la planta de la mostaza, el interruptor genético clave que hace que las plantas florezcan, dando a los jardineros la posibilidad de convertir una espina de rosa en una flor, y a los agricultores la de acelerar la maduración de sus cosechas.Los dos equipos, del Instituto Salk para Estudios Biológicos y de la Universidad de California en San Diego, han demostrado independientemente que se precisa sólo un gen para convertir en flores lo que normalmente serían células de raíz, de espinas, de tallo o de hojas. Una verdadera revolución en las macetas. "Tenemos un control prácticamente completo sobre el inicio de la floración", dice Martin Yanofsky, jefe del equipo de la Universidad de California.

Activando ese interruptor genético, los investigadores han mostrado que pueden reprogramar el reloj biológico de la planta para hacerla florecer mucho antes de lo normal. Un álamo, por ejemplo, no desarrolla flores hasta los diez años de edad, cuando tiene casi diez metros de aIto, pero los científicos del Salk pueden hacerle florecer cuando es una plantita de cinco centímetros. Es la primera vez que se consigue adelantar la floración de un árbol. "Tengo que reconocer que fue una completa sorpresa", admite Detlef Weigel, el director del equipo del Salk, "ya que es un dogma que inducir flores en árboles jóvenes es sencillamente imposible".

Según los expertos, el trabajo es más que una curiosidad hortofrutícula. Casi todos los cultivos importantes deben florecer antes de producir las frutas y granos de los que depende la nutrición de la mayoría de la población mundial. "Las flores del arroz y del maíz no son muy espectaculares, pero son flores, al fin y al cabo" dice Weigel.

Controlar el tiempo de la floración puede permitir a los agricultores adelantar la cosecha. Si se avecina una devastadora helada, por ejemplo, se podría pulverizar una sustancia química sobre los cultivos, previamente modificados tratados por ingeniería genética, para provocar una cosecha temprana.