Un millón de escolares paran un minuto contra las pruebas nucleares

Un millón de escolares, según la cifra del sindicato CC OO, uno de los convocantes junto con STES, UGT o CSIF, pararon ayer durante un minuto para testimoniar su repulsa por las pruebas nucleares francesas en Mururoa. "Hemos parado para que no destruyan todo lo que tenemos", decía Noelia, una niña de 8 años que secundó el paro de un minuto de silencio junto a sus compañeros del colegio Sainz de Vicuña de Madrid. Esta ciudad y la de Barcelona fueron las que más niños y jóvenes movilizaron, el 35% y 65%, respectivamente.

"Pedimos que dejen de fabricar bombas porque no hacen falta", "por muy pequeñas que sean van a destruir el planeta y producir enfermedades en vez de defenderse con bombas tienen que hablar más". Estas son las opiniones de Celia, Álvaro o Hector, de 13 años. Con esta iniciativa, los responsables de CC OO (que ya realizaron un paro similar el pasado día 14) pretendían "extender la protesta de los sectores más concienciados hacia el conjunto de la sociedad".Los niños están más que informados de la situación. Les preocupa "Ilegar a estar como los pobres niños de las guerra que pierden piernas y brazos", que las pruebas lleguen aquí y nos pongan el cáncer como a los niños de Japón" -decía Miguel, de 9 años- o "que se destruya el planeta".

Hasta la fecha, el Gobierno francés ha realizado dos ensayos nucleares en el Pacífico sur. El primero fue el 5 de septiembre en el atolón de Mururoa y el segundo el 2 de octubre en el atolón de Fangataufa. Y en esta ocasión, con la imagen presente en la memoria de la tragedia de Hiroshima, la protesta ha calado hondo en los ciudadanos. No sólo han protestado organizaciones ecologistas y sindicales sino también vecinales, de cooperación y políticas.

Una decena de profesores del Liceo Francés de Madrid se manifestaron ayer frente a este centro, en el que habían colocado una pancarta que rezaba un "No a las pruebas nucleares". Los alumnos más mayores vestían camisetas con mensajes en contra de las pruebas nucleares. Las farolas que rodean el colegio estaban empapeladas con carteles con la exclamación ¡No a Chirac!" y con llamadas a los alumnos a las manifestaciones convocadas para mañana en las principales ciudades españolas por los sindicatos para protestar por la visita del presidente francés.

"Lo peor es que la Opinión mundial estaba en contra de estas bombas y el Gobierno francés no ha hecho ni caso", dice Mª Mar, de 12 años. Su compañera Celia apostilla: "Es un mal. ejemplo porque los demás países también se van a saltar los acuerdos y demostrar su potencia".

Estos escolares están convencidos de que Ias bombas nucleares no son necesarias". Aunque Iván, de 13 años, va aún más allá: "hay que pedir al Gobierno español que se mueva, que haga algo ahora que estamos presidiendo la UE".