Un asesinato, un suicidio, encarcelamientos y dimisiones

La investigación sobre el caso Agusta se inició en 1991 a raíz del asesinato en Lieja de un antiguo ministro socialista, André Cools. La juez encargada del caso, Véronique Ancia, descubrió que la empresa italiana Agusta había entregado en 1988 comisiones ilegales por importe de unos 230 millones de pesetas a los partidos socialistas belgas para que influyeran en favor de la compra por el Gobierno de 46 helicópteros para el Ejército de Tierra. El contrato, firmado en 1989, alcanzó los 54.000 millones de pesetas.Aunque, inicialmente, la investigación afectó sólo al Partido Socialista valón (PS), desde principios de 1995 su homólogo flamenco (SP) es el más tocado por el escándalo. Hasta ahora, el caso Agusta ha provocado el suicidio del ex jefe de la Fuerza Aérea de Bélgica, general Jacques Lefèbvre, ocurrido el 8 de marzo de 1995, y cuatro dimisiones ministeriales.

En 1994, cuando la juez Ancia pidió al Parlamento que levantará su inmunidad, dimitieron tres altos dirigentes socialistas francófonos, conocidos como los tres Guys: el ministro de Defensa, Guy Coeme; el presidente de la región valona, Guy Spitaels, y un miembro del Ejecutivo regio nal, Guy Mathot.

El 22 de marzo seguía sus mismos pasos el titular de Exteriores, Frank Vanderbroukg, tras reconocer que en 1991, cuando era presidente del SP y se enteró de que una caja de banco contenía dinero negro del partido, pidió al tesorero que quemara los fondos procedentes de las comisiones ilegales.

El 20 de febrero, Willy Claes, secretario general de la OTAN desde el pasado otoño y ministro de Asuntos Económicos encargado de negociar las compensaciones económicas del contrato en 1988, negó haber oído hablar de las comisiones de Agusta para el SP. Sin embargo, dos días después tuvo que reconocer que había sido informado, junto al presidente del SP, Louis Tobback, y Frank Vanderbrouke en enero de 1989, por el tesorero del partido, de la oferta de la empresa, que había sido rechazada "rotundamente". El 27 de febrero, Claes declaró voluntariamente ante la juez Ancia y manifestó su intención de colaborar con la justicia.

El 7 de abril, él Parlamentó autorizó, prácticamente por unanimidad, que Claes, Tobback y Coeme declarasen ante el Supremo. Al día siguiente, la policía registró dos viviendas de Claes e inspeccionó sus cuentas. El 12 y el 15 de mayo, Claes fue interrogado por el juez del Supremo Francis Fischer, acompañado por la juez Ancia, sobre si conocía las ofertas de comisiones de Agusta y sobre las razones por las que escogió Agusta frente a sus competidoras.