Molina Foix advierte de la tendencia crear 'escritores de diseño'

Tras el éxito de novela de José Ángel Mañas, Historias del Kronen, las editoriales han descubierto un público lector de jóvenes urbanos con el que no habían contado. El escritor Vicente Molina Foix, asegura que algunos editores están "a la caza y captura" de autores que satisfagan esa voraz demanda. Con ello se podría caer en la figura anglosajona del escritor de diseño, creado por el editor a la medida del mercado.

Vicente Molina Foix, que intervino ayer en los martes literarios de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander, lamentó "la dictadura de la edad" que afecta a la industria española del libro, por la que cualquier, autor joven es recibido con euforia por los medios y el público. Para el escritor, este efecto es aún más cruel en el cine, donde la presión de lo nuevo ha empezado a desplazar a autores en la flor de la madurez como Saura, Borau y Gutiérrez Aragón.Además de la sed por lo joven, las editoriales "que no son ninguna ONG", como señala Molina Foix, se han dado cuenta de que la literatura de calidad puede escalar muy alto en los índices de ventas, y han vestido de gala mercadotécnica a autores que, en otros tiempos, habrían permanecido al margen de los circuitos de las grandes cifras, como Luis Landero, Javier Marías, Félix de Azúa o Eduardo MendozaDespués de un par de décadas de obsesión por todo lo venido de fuera, la cultura española corre ahora el riesgo de "insularizarse", según Molina Foix, que señala que "los editores ya no encuentran rentable publicar literatura extranjera". Este temor está en los antípodas del análisis que el catedrático de Historia del Arte, Francisco Calvo. Serraller, hiciera el lunes, también en la UIMP, según el cual la cultura española ha abandonado su ensimismamiento para lanzarse a un "cosmopolitismo militante" que la ha vaciado de sus raíces.Con todo, el escritor ve con optimismo la "normalización" que vive la literatura española, en la que conviven en el momento actual los supervivientes a muchas cosas -la edad entre ellas-, una generación entre dos. aguas y una proliferación de jóvenes autores. "El lector ha descubierto el placer de leer a sus contemporáneos", dice en referencia a la mayor accesibilidad de la literatura que ha supuesto la renuncia de los autores a los experimentos formales.Pero el espíritu experimental, no está definitivamente enterrado. En septiembre, Molina Foix publica su última novela, La misa de Baroja, que incorpora notables dosis de exploración formal.Las tres partes de la obra dan al lector la opción de leerlas como tres novelas distintas, que se imbrican como un todo en un laberinto de personajes compartidos y estructuras narrativas comunes.

La novela de Molina Foix analiza el porqué de la necesidad de creer y crear las leyendas y explica su autor, "explora por qué los humanos tenemos la necesidad de inventar mitos para poder aceptar la realidad".

En octubre, el escritor verá estrenada en Londres, la ópera La madre invita a comer, su segunda colaboración con el compositor Luis de Pablo.