_
_
_
_
_

De menos a más

El término minimalista es quizá el más acertado a la hora de definir las andanzas de Lou Barlow -ex bajista de los ya clásicos Dinosaur Jr.- al frente de Sebadoh. Lou Barlow se responsabiliza ahora de la guitarra y de la voz, trenzando junto al bajo y la batería un sonido en el que cada instrumento va trazando una línea melódica singular y bien perfilada.Es este intérprete la negación misma de la sofistificación, en lo que se refiere a arreglos musicales, que conduce a una manera diferente y más desnuda de entender la música; un modo distinto de percibir la belleza de unas canciones ciertamente difíciles, que llevan dentro un trabajo duro para profanos, y que puede hacerse extenuante ante la contemplación de un directo con un número limitado de atractivos. Pero siempre hay gente que disfruta con la contemplación del desierto.

Menos, mucho menos áridos y más comprensibles en sus intenciones resultaron Siniestro Total en la presentación de su noveno disco, Policlínico Miserable. Julián Hernández y compañía renuncian a hacer cualquier tipo de experimentación y retornan a la meca de los músicos veteranos que crecieron con el rock 'n rolI: el retorno a los sonidos negros, curación y purificación contra la estupidez de una raza humana que sólo evoluciona hacia atrás.

El hecho es que los genios de Vigo muestran ya un grado de madurez -en realidad ya son bastante talluditos, vaya- que les aleja de la canción-pareado de sus inicios y les mete en veredas en las que, si bien sigue cabiendo la sonrisa, ésta se tuerce en un rictus adulto. Con ese cruce de rythm'n blues y textos inteligentes, más algún que otro ramalazo a lo Spin Doctors, se producen temas que hacen explorar la propia conciencia con un amargo sentido del humor: "España bebe. España se droga. ¿A dónde va, señor, la juventud española?". Realmente difícil de superar.

Explosión playera

Lo más de este verano puede ser la explosión playera del renombrado Acid Jazz. Se trata de una explosión comercial y masiva, en nuestro país, claro, que siempre va atrasadillo para cualquier vanguardia que no sea flamenca. Freak Power son un numeroso combo, liderado por el ex Housemartin Norman Cook, que se ha convertido en un famoso por su canción Turn on Tune in Cop out, que ahora sirve como soporte sonoro de un anuncio de vaqueros y travestidos.No obstante, el resto de su primer elepé es excelente y su puesta en escena, gracias a su enorme cantante-trombonista Ashley Slater, tremendamente lúdica. Son la apuesta del neohippysmo de luxe con vocación light y pija, aunque tremendamente masivo. Música para bailar en cualquier momento y lugar, multirracial y con suficiente groove como para marear tus caderas. Al menos eso debían pensar los miembros del respetable que terminaron el concierto bailando sobre el escenario junto al grupo. Parecían encantados.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_