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Los guionistas de cine compiten con los autores de 'best seller'

Los jóvenes se vuelcan hacia esta fórmula

Hace años, escribir guiones para cine pudo ser una dedicación de segunda fila. Ahora es una ocupación sexy, se dice en Hollywood. "En los años setenta, la gente se preguntaba sobre si sería capaz de escribir una nueva novela. La pregunta actual es si se llegará a escribir un guión con el éxito que ha conseguido Pulp fiction", de Quentin Tarantino.

Del guión de Pulp fiction, editado por Hyperion en Estados Unidos, se han vendido cien mil ejemplares, decenas de miles de ejemplares se difundieron estos años de El piano y Juego de lágrimas, entre otros muchos. El interés por ser guionista se refleja en la aparición de editoriales de libros y revistas sobre este género. Applause es el nombre de una casa editorial y un comercio neoyorquino especializado en teatro y libros de cine. Applause ofrece más de 700 guiones publicados y 70 libros que enseñan cómo se concibe y desarrolla un guión. Las ventas se han incrementado en un 40% durante los últimos tres años.Un aumento semejante en meses ha registrado otra publicación titulada Scenario y subtitulada 'Magazine of sckeenwriting art', cuya primera entrega este invierno incluía cuatro guiones, entre ellos Cuatro bodas y un funeral y El silencio de los corderos, con análisis sobre sus estructuras. "Empezamos con esta revista no sólo porque los guiones, se han puesto de moda, sino porque se trata, sin duda, del arte de los noventa".

Dinero a cambio

Un arte que empieza a estar remunerado con la categoría e los libros best seller. En 1990, Joe Eszterhas vendió ya su guión de Instinto básico por tres millones de dólares. El récord fue después rebasado por el último texto de Shane Black, The long kiss goodnight, facturado por cuatro millones de dólares, y será de nuevo superado por la última entrega de Eszterhas, Foreplay, que puede aportarle hasta 12 millones de dólares tras negociar la venta del manuscrito más los derechos sobre taquilla y las ventas de la banda sonora. La tarifa mínima que establece la asociación Writers Guild of America para los guionistas es ahora entre los 31.000 y los 63.000 dólares, según el presupuesto del filme.Además de la ficción natural, no es extraño que cada vez más jóvenes y no jóvenes se interesen por ser guionistas. El trabajo es atractivo, la remuneración aumenta y la fama se recobra tras años en que este contribuyente del filme pasaba por ser un profesional anónimo para el público. Stephen Pevner, un agente literario de Nueva York, declara que el número de guionistas pidiendo su representación ahora llega a ser de varias decenas a la semana.

No importa tanto a estas alturas que no se conozca bien la técnica para redactar un guión. Además de academias, profesores y libros dispuestos a enseñar el oficio en semanas, existen programas en el ordenador, como Scriptor, merecedor de un premio de la Academia de Cinematografía.

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