"La igualdad de la mujer exige revisar toda la política municipal"

La cabeza de lista de Plazandreok, Juana Aranguren, es una abogada nacida en Bilbao, pero afincada en San Sebastián desde hace 23 años, que tiene por costumbre bañarse, en las aguas del Cantábricó todos y cada uno de los días del año. Militante activa del Movimiento Feminista, soltera y sin hijos, ha sido asesora del Instituto Vasco de la Mujer (Emakunde) y está especializada profesionalmente en la defensa de la mujer.Pregunta. ¿Ustedes tratan de llegar al Ayuntamiento sólo para ejercer el feminismo desde una plataforma institucional, o es que tienen además un proyecto municipal propio, específico, para San Sebastián?

Respuesta.. Ambas cosas. Queremos estar en el Ayuntamiento en nombre propio representándonos a nosotras mismas, como garantía de que la voz y las necesidades de las mujeres van a ser tenidas en cuenta, y, por otro lado, planteamos redefinir la política municipal.

P. ¿Y qué significa redefinir la política municipal, en qué se traduce?

R. Significa revisar bajo el prisma de la igualdad de oportunidades todas las políticas municipales que se hacen en relación al urbanismo, al empleo, al transporte, en relación a toda la vida municipal. En esos espacios, las mujeres seguimos siendo invisibles.

P. ¿Puede precisar cómo se produce esa discriminación, por ejemplo, en materia de urbanismo?

R. Está bastante claro, por ejemplo, que la política de vivienda no ha sido la adecuada y para darse cuenta de eso basta con ver que el precio medio de la vivienda en esta, ciudad es de 26 millones. ¿Qué pasa? Pues que las mujeres somos las más pobres, que muchas no pueden hacerse con una casa. Que faltan viviendas de alquiler a precios asequibles, que las mujeres no pueden ser independientes.

P. Más allá de esa revisión general, ¿qué aspectos concretos de la política municipal relacionados con la mujer pretenden modificar?

R. Queremos que se amplíe el presupuesto asignado a la Concejalía de la Mujer. Que se potencien las guarderías. Por un lado, todos parecen muy preocupados por el descenso de la natalidad, "cada vez somos menos vascos", dicen, pero, por otro, no se hace nada. Luego está el reparto del trabajo doméstico.

P. ¿Y cómo puede modificar el Ayuntamiento el reparto equilibrado del trabajo doméstico?

R. Con campanas de sensibilización. No es casualidad que más de la mitad de las mujeres abandonen sus trabajos remunerados al contraer matrimonio. También se pueden hacer campanas contra los malos tratos, que es un asunto al que hay que darle de una vez la importancia política que tiene.