Destituidos en Italia inspectores que absuelven a Manos Limpias

Filippo Mancuso, ministro italiano de Justicia -que la semana pasada desencadenó una áspera polémica al ordenar una nueva inspección en la Fiscalía de Milán que llevó a cabo la investigación anticorrupción conocida como Manos Limpias-, ha suspendido a los inspectores que, hace pocas semanas, realizaron un primer informe totalmente favorable a la magistratura milanesa.Los inspectores, que son, a su vez, magistrados, y que han sido devueltos a los destinos en los que quedaron excedentes para incorporarse al ministerio en comisión de servicio, habían pro testado porque consideraban injurioso que el ministro sostuviera, como hizo la semana pasada ante el Parlamento, que el contenido de su informe, favorable a Manos Limpias, se debía a que habían sido initimidados por Saverio Borrelli, el fiscal jefe de Mi lán. Borrelli escribió en su día una carta al presidente de la República, Oscar Luigi Scalfaro, pidiéndole que aclarara hasta qué punto los inspectores del mi nisterio podían pedir informa ción sobre investigaciones en curso, cubiertas por el secreto.

Dicha carta de Borrelli es el motivo que Mancuso alega para ordenar una nueva investigación sobre los mismos presuntos abusos de la Magistratura de Milán que fueron descartados en la primera inspección.

La nueva iniciativa del Ministro ha endurecido el debate político entre la derecha, favorable a su actitud, y la izquierda, que le critica. Ha suscitado, sobre todo, una mayor división en el seno de la derecha, donde sectores importantes de Alianza Nacional (AN) no comparten el entusiasmo por Mancuso, de Forza Italia. Ignazio La Russa, portavoz de los diputados de AN en la Cámara, dijo ayer que al ministro no le queda más salida que dimitir, y que con él debería caer todo el Gabinete.

En las filas de la izquierda, donde la caída del Gobierno de Lamberto Dini no interesa en absoluto, avanza la tendencia que desea que el Parlamento pida la dimisión de Mancuso si el ministro no corrige su actuación.