Confusión en Moscú sobre los acuerdos militares entre Yeltsin y Clinton
Expertos y políticos rusos cuestionaron ayer los acuerdos en el ámbito militar logrados el día antes por el presidente Borís Yeltsin y su homólogo norteamericano, BU¡ Clinton. Algunos expresaban reservas ante la luz verde que Rusia ha dado a Estados Unidos para la creación de sistemas antimisiles de carácter táctico. Otros se mostraban confusos sobre el alcance del compromiso adquirido por Yeltsin para suspender- la venta a Irán de material nuclear susceptible de ser utilizado con fines militares.
En el terreno de las armas convencionales, hay indicios de que Washington y Moscú no acabaron de entenderse sobre las modificaciones al Tratado de Reducción de Armas Convencionales en Europa «CFE).En la cumbre de Moscú, Rusia aceptó la posibilidad de crear e instalar un sistema antimisiles de carácter táctico que, según el comunicado oficial conjunto, responde a la necesidad de reaccionar ante la amenaza de la "proliferación mundial de misiles y su tecnología". Rusia ha efectuado así tina concesión a Estados Unidos, que desea un sistema de protección contra eventuales agresores nucleares, una categoría en la que Washington coloca a países como Irán, Irak o Corea del Norte.
Para convencer a Moscú, Clinton ha dado garantías a Yeltsin de que se respetará el tratado ABM de 11972. Este documento, que ha sido hasta ahora el elemento clave de toda la concepción del equilibrio nuclear basado en la destrucción mutua, prohíbe la creación de sistemas antimisiles de tipo estratégico.
A pesar de las garantías, los expertos rusos han advertido que el desarrollo de un sistema antimisiles de tipo táctico puede transformarse en un sistema de carácter estratégico, lo que equivaldría a una segunda oportunidad para el programa conocido como guerra de las galaxias.
En Moscú, Estados Unidos y Rusia se han puesto de acuerdo para resolver las indefiniciones existentes sobre algunas características técnicas que diferencian los sistemas de defensa antimisiles estratégicos y los sistemas contra los misiles tácticos. Tras la cumbre, fuentes norteamericanas admitieron que los sistemas antimisiles de tipo táctico "pueden tener alguna capacidad teórica para interceptar misiles estratégicos en circunstancias cuidadosamente controladas".
En lo que se refiere a la -venta de equipo nuclear a Irán, el académico Georgui Arbatov, jefe del Instituto de Estados Unidos y Canadá, manifestó que hay muchas cosas confusas en el. contrato nuclear ruso-iraní y afirmó que "no está claro si éste tenía un componente militar y si existía base para un acuerdo". Por su parte, el ministro de Energía Nuclear Víctor Mijáilov, dijo que el contrato con Irán no ha sufrido "cambios". El ministro afirmó que todos los contratos firmados con aquel país en el pasado en el ámbito de la energía atómica se refieren a proyectos pacíficos y señaló que ninguno de ellos preveía la construcción de una centrifugadora.
En cuanto al acuerdo de Armas Convencionales en Europa, fuentes del Ministerio de Exteriores reiteraron ayer a la agencia Interfax que Rusia no puede cumplir con las limitaciones sobre los flancos previstas en el CFE para el próximo noviembre, mes en que el tratado entra en vigor. Estados Unidos ha mostrado comprensión por el deseo ruso de modificar el CFE -un documento firmado por la URSS en 1990-, pero pretende que Moscú se atenga al documento en noviembre -es decir, que reduzca el equipo militar que supera los límites impuestos- y plantee las modificaciones en mayo de 1996, en un foro especialmente convocado para ello.
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