Campos sostenibles de Castilla...

Soria, una de las provincias más deshabitadas (apenas 100.000 habitantes), puede convertirse en los próximos años en el campo de aplicación de la tan divulgada filosofia del desarrollo sostenible.Papeletas no le faltan. La Fundación Desarrollo y Naturaleza (Deyna), cuyo núcleo está formado por sorianos y miembros del capítulo español del Club de Roma, pretende que la provincia salte del adormecimiento en que se encuentra sumida en muchos aspectos a la punta de lanza de un desarrollo armónico con la naturaleza. Todo sin pasar por los efectos negativos que ha supuesto el desarrollismo y la industrialización a ultranza en muchas regiones de España. Tratan de aplicar con rigor y concreción ese lema ecologista tan en boga: "Piensa globalmente y actua localmente".Lo explica Raúl Pisano, presidente de la fundación, ingeniero industrial y economista: "Soria es un magnífico punto cero para poner en práctica este nuevo modelo de desarrollo sostenido y ecoevolutivo, precisamente porque apenas ha caído en el otro, el que se concibe de espaldas al entorno". El objetivo económico está claro: "Evitar", apunta Pisano, "que siga el preocupante proceso de despoblamiento y envejecimiento de la provincia". Quieren hacer de Soria el epicentro de un movimiento de investigación y reflexión ambiental.

A la presentación, realizada recientemente en Madrid, los promotores de la fundación acudieron con buenos apoyos morales. Entre ellos, los del Club de Roma y la Unesco, que promueve a través de sus reservas de la biosfera la idea del desarrollo sostenible. Sus patronos de honor son los señores de Marichalar, condes de Ripalda.

Ideas tampoco les faltan. Algunas ya están en marcha, como la edición de libros de ingeniería ambiental (15 volúmenes), cuya estrella es el Diccionario de medio ambiente y contaminación, con 70.000 términos, y la implantación de una universidad privada de posgrado, "centrada en los problemas del medio ambiente, salud y desarrollo sostenido y humanístico". En este sentido, el próximo curso echará a andar el Programa Internacional de Estudios Medioambientales, impartido por el Crandon College y la Universidad de Staffordshire.

Además, está muy avanzado el proyecto para convertir un fielato que se encuentra junto a los claustros de San Juan del Duero, camino de San Saturio, en un centro de información y museo ornitológico. Otros objetivos: crear un museo archivo sobre la trashumancia, el pastor y la oveja merina; abrir una hospedería integrada en el paisaje, y un museo en el viejo depósito de aguas del castillo de la capital para acoger la colección botánica de Antonio Segura, y levantar un museo a partir de la exposición Amada Tierra, que Repsol ha cedido a la fundación.

No es la única iniciativa que quiere hacer de los campos que inspiraron a Machado un modelo de futuro sostenible, haciendo camino al andar. Desde hace 10 años trabaja en Navapalos, a 12 kilómetros de Burgo de Osma, la asociación Interacción, fundada por el arquitecto alemán afincado en España Erhard Rohmer, para recuperar y fomentar la construcción de edificios con tierra, con adobe. Ya han restaurado tres casas, la zona de la fuente y el antiguo Ayuntamiento de este pueblo, abandonado en los años sesenta. De Soria al mundo. Desde Navapalos están extendiendo su iniciativa a Uruguay, Nicaragua y Colombia. Pero el problema en ambas iniciativas es el mismo: el dinero, como apunta Pelayo del Riego, secretario general de Deyna.