El Gobierno rechaza Ciudad de México como sede del diálogo con los zapatistas

El diálogo epistolar entre el Gobierno de México y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), la guerrilla alzada en el sureño Estado de Chiapas en 1994, ha dado paso a un tira y afloja sobre el lugar en el que verse las caras para negociar la paz. En la madrugada de ayer, el Ejecutivo rechazó de forma implícita la propuesta de la guerrilla de iniciar ya el diálogo en la capital y pidió al EZLN que se ciña a los lugares de Chiapas presentados por los mediadores.

La oferta zapatista, que llegó en la tarde del martes firmada por el subcomandante Marcos, era un regalo envenenado: la elección de la Ciudad de México como sede de las conversaciones, con la excusa de que la militarización de Chiapas hace imposible un encuentro, pone al Gobierno en la disyuntiva de tener que aceptar un lugar de gran impacto informativo o de retirar al Ejército de la selva Lacandona, donde entró el 9 de febrero, algo que hasta ahora se ha descartado.Haciendo una vez más gala de visión escenográfica, los zapatistas abrieron un abanico de cuatro posibilidades: la Catedral metropolitana, la Basílica de Guadalupe, la Universidad Nacional Autónoma y la sede de la ONU, todas ellas marcos incomparables para helar la sangre a los representantes gubemamentales, más proclives a celebrar encuentros discretos "en algún lugar del sureste mexicano".

El bosquejo del diálogo que ha hecho el EZLN en su comunicado se parece más a unos Estados Generales que a las conversaciones de paz: los "temas políticos, sociales, culturales y económicos se ventilarán", propone la guerrilla, en reuniones "plenarias" con la participación de partidos políticos, organizaciones no gubernamentales, movimientos sociales (campesinos, indígenas, mujeres) y "ciudadanos".

Si bien el Gobierno se reserva su respuesta hasta tener el documento del EZLN "en mano", ya ha adelantado que el comunicado de la guerrilla "contiene propuestas atendibles y otras inviables", por lo que le pide que agilice las consultas a través de las comisiones mediadoras.

A pesar de todo, los partidos políticos acogieron con optimismo el comunicado zapatista. Las cuatro sedes, coincidieron, son lo de menos. Lo importante es que el diálogo comience ya.