El Salón del Libro de París rinde homenaje al escritor Juan Benet

"El escritor de los escritores". Así definió Javier Marías a Juan Benet -el autor fallecido en enero e 1993- durante el homenaje que se le tributó Ver en París, en uno de los actos del XV Salón del libro, que se celebra en la capital francesa, dedicado este año a España. El escritor Eduardo Mendoza resumió de manera tajante el papel desempeñado por Benet en la renovación de la narrativa española al decir: "El hecho más importante ocurrido en los últimos 10 años dentro del panorama de las letras hispanas es la muerte de Juan Benet". Una gran expectación rodeó el homenaje al autor de Volverás a Región.

La dirección del XV Salón del Libro de París celebraba ayer que esta edición significase un importante reencuentro con el público ya que cálculos moderados les permitían afirmar que la asistencia había aumentado, respecto al año anterior, en un 30% y que, por consiguiente, el número de visitantes rondaría los 250.000. El hecho e que España haya sido el país invitado no es ajeno a ese éxito.Quizás la acogida más calurosa, por inesperada, ha sido para un ausente, Juan Benet. Al acto de homenaje, en el que participaron, entre otros, Javier Marías, Félix de Azúa, Eduardo Mendoza, Claude Murcia, Daniel Zerki y los actores Roland Bertin y Yann Colette, fue sorprendentemente emotivo y ha descubierto una incipiente "benetofilia" entre muchos jóvenes franceses.

El 9 de mayo, en Bobigny, una localidad de los alrededores de París, se estrenará Agonía Confutans, un texto teatral de Benet escrito en 1966. Con ese mínimo pretexto se ha organizado el homenaje..

Renovación

Eduardo Mendoza habló sobre el papel jugado por Benet en la renovación de la narrativa española y Javier Marías recordó varias anédotas de su relación con el autor. Félix de Azúa leyó algunos textos de Benet, que fueron ovacionados, Blanca Andreu, en su evocación, dedicó una atención especial "a los fracasos, de los que sacaba un gran provecho y lo mucho que supimos disfrutarlos".

Todos los actos públicos protagonizados por escritores españoles han atraído a una asistencia numerosa y entusiasta, muy a menudo joven y sin vínculos familiares con España. "El año anterior, con 8 narradores italianos, no obtuvimos una respuesta tan amplia ni mucho menos", decía uno de los organizadores. El Salón, que no -de tanto su éxito por las transacciones comerciales como por su repercusión publicitaria, ha obtenido también un gran eco en los medios de comunicación.

Novelistas como Juan Marsé y Sergi Pamies se han metido a la platea en el bolsillo contando sus venturas y desventuras como autores traducidos, mientras Fernando Savater, Jorge Semprún y Javier Tussell lograban dejar fuera del salón de actos a varios. centenares de personas que querían oírles hablar de Literatura y política. Lo mismo ocurrió con María Mercé Roca, Bernardo Atxaga y Carlos Casares, que trataron el tema Lenguas y culturas.

El éxito de la nueva narrativa, que Rafael Conte resumió con humor al decir que los de la joven generación escriben mejor porque son más cultos, más leídos, han viajado más, son plurilingües y bisexuales, tienen una manera más amplia y rica de percibir el mundo", fue relativizado por Javier Marías en tanto "nuestro país siga viviendo en falsa paz consigo mismo", un fenómeno relacionado con "la necesaria amnesia colectiva" al que se refiere Semprún para explicar el milagro de la transición política y, al mismo tiempo, la debilidad de lo construido. Sonia García Soubriet celebró "la coexistencia de varias generaciones de escritores" y coincidió con Marías en que "ahora disponemos de una lengua nueva, mucho más próxima al lector".