Incineradoras sí, incineradoras no
En Galicia se ha decidido, por parte de la Xunta, crear una inicineradora de residuos tóxicos en Somozas (cerca de Pontedeume, La Coruña) y una planta de residuos sólidos urbanos en la localidad coruñesa de Cerceda (donde está ubicada ya una central térmica perteneciente a Unión Fenosa).La planta de Somozas empezará a funcionar muy pronto, dentro de unos meses. La incineradora de Cerceda, donde se pretende quemar todos los residuos urbanos de Galicia, se construirá pronto, al parecer, y se pretende tenerla activa en dos años.
En el mundo existe un intenso debate sobre la idoneidad de promocionar las incineradoras como método de abolición de residuos. El movimiento ecologista mundial está en contra, ya que la incineración, más que resolver el problema' de los residuos, lo complica. Por un lado, se genera ceniza que será preciso guardar en algún lugar. Pero es que, además, los gases de la , incineración se expanden por una amplia zona del territorio y su potencial tóxico es alto (fundamentalmente por las dioxinas generadas en el proceso de combustión). La incineración transforma más que destruye. Genera tóxicos de alto poder negativo para el medio ambiente y para toda la escala biológica. No estamos, pues, resolviendo un problema, sino generando otro mayor.
Así se entiende por parte del Gobierno central, que en su último plan de residuos no considera la incineración como un método a promocionar, sino a marginar. En ese sentido, el Gobierno central se acerca a las concepciones ecologistas que potencia las tres R (reutilizar, reducir, reciclar). Frente a esta concepción, en la que queda de manifiesto la primacía de atención a la salud pública frente a los intereses de la gran industria, el plan de la Xunta actúa a la inversa: pretende pasar por encima de los intereses colectivos y atender 'las demandas de Fenosa, que, una vez más, no ve más allá de sus narices.
Pero no está saldado este asunto; se están iniciando los primeros pasos de lo que va a ser, una gran movilización popular. Cerceda no va a ser un municipio mártir. Si no, al tiempo...-
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