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Oreja propone mantener las cuotas televisivas durante un plazo de 10 años

Xavier Vidal-Folch

El comisario responsable de Cultura y Audiovisuales, Marcelino Oreja, se mostró ayer partidario de que las cuotas audiovisuales europeas no sean eternas y queden sometidas a un plazo en la revisión de la directiva Televisión sin fronteras. Oreja situó en 10 años la vigencia temporal de las nuevas Cuotas, un periodo "suficiente, me parece dificil que fuera inferior" y "bastante largo", dado el ritmo de transformaciones tecnológicas y culturales.Este plazo permitiría "robustecer la industria europea de programas, que actualmente atraviesa un momento de gran fragilidad". Y argumentó que, tras diez años de apoyo, esa debilidad debería trocarse en fortaleza.

El comisario español insistió en que esa idea no es definitiva, sino que constituye una primera aproximación, tras los debates mantenidos en el seno de la Comisión, el Consejo y el Parlamento Europeo.

Oreja sugirió que las nuevas cuotas a proponer sean más flexibles y "moduladas". Así, las cadenas generalistas y las temáticas no tendrían idéntico tratamiento; habría que reconsiderar el cómputo de la obra antigua para el cumplimiento de las cuotas; y se podrían contabilizar probablemente las producciones de estudio además de las de ficción, seriales y documentales.

"Quiero cerrar este asunto durante el mes de marzo", agregó el comisario. Su posición se sitúa entre quienes se alejan tanto de la crítica rotunda a las cuotas, como de la postura francesa, que pretende mantenerlas indefinidamente. El presidente de la Comisión, Jacques Santer, ratificó ayer públicamente que la Comisión tendrá aprobada una propuesta sobre este asunto para el 15 de marzo.

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