17.000 evacuados en Alemania a causa de una bomba de la II Guerra Mundial
La neutralización de una bomba de la II Guerra Mundial, operación casi cotidiana en Alemania, necesitó que ayer fuesen evacuadas 17.000 personas de la localidad de Orianenburgo, cerca de Berlín. Cuando Alemania conmemora este año el 500 aniversario de los bombardeos aliados que arrasaron prácticamente las ciudades de la Alemania nazi, los artificieros siguen descubriendo y desactivando todos los días artefactos que no estallaron en su momento. Los artificieros desactivan cada año una media de 6.000 bombas y 900 toneladas de explosivos en todo el país.
La bomba de Orianenburgo, de fabricación norteamericana y de 250 kilos de peso, fue descubierta en unas obras de construcción, y para proceder a su total neutralización las fuerzas de seguridad hicieron evacuar a toda la población en torno a un radio de un kilómetro.
Según los expertos, los habitantes de Orianenburgo -un centro industrial muy importante bajo la Alemania nazi- viven sobre un auténtico polvorín: del 15% al 20% de las bombas caídas sobre la región no estallaron, y una gran parte está equipada con. detonadores químicos que pueden funcionar por sí mismos debido a la oxidación del metal.
En octubre y noviembre pasados, 15.000 personas fueron evacuadas en Ludwigshaven, al oeste del país, pata permitir desactivar dos bombas. Los accidentes suelen ser rarísimos, pero con los años y la humedad los detonadores se hacen cada vez más sensibles.
El método más habitual para encontrar las bombas es el estudio de las fotos tomadas durante la guerra por los pilotos aliados, en las que aún se ven claramente las bombas o sus huellas sobre el suelo. Los empresarios alemanes que realizan trabajos públicos llevan a cabo previamente sondeos antes de actuar sobre zonas sensibles.
Durante la II Guerra Mundial, los gobiernos aliados occidentales autorizaron el bombardeo aéreo intensivo de las ciudades enemigas para destruir el potencial económico, de Hitler y desmoralizar a la población civil alemana.
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