Borrell elevará al Gobierno Un paquete de medidas anticorrupción para todas las administraciones

El Ministerio de Obras Públicas ultima la recopilación de un paquete de medidas anticorrupción que ya se aplican en el departamento con el fin de intentar traspasarlos al funcionamiento del resto de las administraciones. José Borrell, titular del ministerio, tiene la intención de llevar este proyecto a la Comisión Delegada y que allí se abra un debate sobre el alcance exacto de las medidas a adoptar. La filosofía del proyecto, en el que participa Economía, es dotar de una mayor transparencia a los actos administrativos, especialmente a los que tengan que ver con adjudicaciones, contratos o subastas. El MOPTMA batió en 1994 el récord de licitación, con 795.6110 millones, un 3,3% más que en 1993.

La doble advertencia o petición de Borrell -el 17 de abril de 1991 y el 30 de noviembre de 1994- a los constructores para que no pagaran comisiones para obtener obras y no abonaran el círculo de la corrupción parece que no va a quedar ahí. El departamento que dirige está elaborando un documento, en colaboración con el Ministerio de Economía y Hacienda, en el que se recogerá un conjunto de iniciativas destinadas a contener, evitar o prevenir posibles casos de corrupción, según confirmaron fuentes de Obras Públicas.Una vez elaborado, Borrell tiene previsto elevarlo al Gobierno muy posiblemente a través de su estudio en la Comisión Delegada para Asuntos Económicos, con el fin de que tras el debate se configure un documento de consenso. Este ulterior documento, en el que se pretende que se incluyan las menores modificaciones legislativas posibles, debería ser presentado al resto de las administraciones públicas corporaciones locales y comunidades autónomas- para que analicen la posibilidad de llevarlos a la práctica.

Este paquete de medidas está inspirado en la propia experiencia del MOPTMA. Desde que el equipo de Borrell desembarcará en el departamento, se han ido concatenando una serie de decisiones destinadas tanto al control de la gestión interna como al de los procesos de adjudicación, con el objetivo de dotar a. todo ello de una mayor transparencia. Las medidas más llamativas en estos años han sido:

- Constitución de una Comisión de Inversiones. En ella participan varios directores generales del ministerio dedicados a analizar todos los expedientes y que los criterios de decisión sean homogéneos.

- Creación de una Dirección General de Control de Gestión. De ella depende la inspección de contratos públicos y ambas tienen la responsabilidad de vigilar los procesos de adjudicación y desarrollo de las obras hasta su término.

- Exigencia de que todos los proyectos que opten a concurso público presenten la mayor documentación posible.

- Elaboración de un sistema estadístico que proporciona una amplia información de las empresas beneficiarias de las adjudicaciones.

Estas medidas no sólo se han puesto en práctica en el funcionamiento interno del ministerio, sino que todos los presidentes de las empresas públicas dependientes de él recibieron, a principios de año, una especie de manual de auditoría interno en el que se compendían todas estas cautelas.

A esos cuatro grandes bloques de control se van a sumar medidas adicionales que saldrán de las conversaciones que mantengan en las próximas semanas los responsables de Obras Públicas, Economía y SEOPAN, la organización que agrupa a las principales empresas de la construcción.

Entre ellas se incluirá una nueva propuesta de control de las adjudicaciones, implicando más directamente al conjunto de los funcionarios que llevan a cabo esa misión, a través de informes técnicos y la firma de cada autorización que cursen. Además, el MOPTMA elaborará una estadística en la que se recogerán todas las modificaciones de obras, es decir, las reformas que las constructoras realizan en los proyectos a medida que van a avanzando.

Porútra parte, el subsecretario del. MOPTMA, Antoni Llardén, presentó ayer las cifras más significativas del cierre del año del departamento. Entre ellas destaca la licitación, que ascendió a 795.680 millones, lo que representa un aumento del 3,3% de lo alcanzado en 1993, con lo cual marca un nuevo récord.

Estas curas traducidas a contratación efectiva dan como resultado 5,19.000 millones de pesetas, con un 99,8% de cumplimiento sobre lo previsto a principios. de año, A lo largo del ejercicio pasado, la baja media en los precios de las obras públicas se situó en el 38,9%. En 1993 esa cifra se había disparado hasta el 39,7%.

En cuanto a la ejecución presupuestaria, el MOPTMA alcanzó el 99%, según remarcó Llardén. En concreto, facturó 1,3 billones de pesetas y desembolsó 1,2 billones. Por ámbitos de actuación, en carreteras se invirtieron 480.000 millones de pesetas; en obras hidráulicas, 149.000 millones y en ferroviario, 95.000 millones.

Por último, el director general del Presupuestos, Francisco Ballesteros, remarcó que el plazo de pago de certificaciones se ha reducido a 61,7 días y que son inexistentes las deudas con las constructoras y con las personas expropiadas.