La depresión y la ansiedad provocan mayor absentismo laboral que los problemas físicos
Los problemas mentales corrientes, como la depresión grave y la ansiedad generalizada, producen mayores alteraciones en la vida cotidiana que las afecciones físicas crónicas, como la artritis, la diabetes o los dolores de espalda, según se pone de manifiesto en un estudio coordinado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), dado a conocer la pasada semana.Las personas aquejadas de este tipo de alteraciones psíquicas son incapaces de realizar sus actividades cotidianas, como trabajar, hacer compras, comer u ocupar su tiempo libre durante una media de seis días al mes, frente a los dos días de los enfermos físicos.
El cuadro sintomático que presentan este tipo de enfermos psíquicos es la ausencia de motivación, una disminución de la confianza en sí mismo, una mala concentración y una pérdida de la energía, según el doctor Johan Ormel, del Departamento de Psiquiatría Social de la Universidad de Groningen, en Holanda, principal autor del estudio.
Los responsables de este estudio, llevado a cabo en 14 países de América, Europa, África y Asia, se han interesado especialmente por la incapacidad y la pérdida de productividad en el trabajo. "La hipótesis más probable es que, en general, las alteraciones psíquicas y la incapacidad se refuerzan mutuamente, con la aparición de un dolor psiquiátrico que llega a tener un alcance funcional que altera a su vez su refuerzo social y su autoestima, proporcionando nuevos alimentos a la enfermedad psiquiátrica", señalan los autores, que piensan que una prevención y un tratamiento eficaces podría mejorar las incapacidades físicas y restaurar el funcionamiento social en los pacientes con alteraciones psíquicas.
Entre las personas aquejadas por una alteración mental diagnosticable, el 35% manifestaba una baja entre moderada y grave de la capacidad de trabajo, frente al 7% de los enfermos sin síntomas psiquiátricos. El estudio, cuyos resultados se dieron a conocer ayer en Journal of the Americam Medical Association, precisa que este problema afecta tanto a los países desarrollados como en desarrollo. "La existencia de una relación sistemática entre la presencia de alteraciones psíquicas y la incapacidad en un gran abanico de países y culturas revela la importancia que revisten las alteraciones psicológicas corrientes para la salud pública en el mundo", afirman los autores del estudio.
Más de 25.000 pacientes han sido seleccionados; de ellos, 5.438 han pasado un examen psiquiátrico completo asociado a un balance de su incapacidad. Los participantes, entre 15 y 65 años, proceden de ciudades de Alemania, el Reino Unido, Brasil, Chile, China, Estados Unidos, Francia, Grecia, la India, Italia, Japón, Nigeria, Holanda y Turquía.
Médicos generales
Casi coincidiendo con la presentación de este estudio, se hicieron públicos en Nueva York los resultados de otro realizado por un grupo de psiquiatras estadounidenses que demuestra la importancia de identificar un problema mental en la primera línea de la atención sanitaria: la medicina general. El trabajo, en el que se utilizó un sencillo cuestionario, demostró que sólo el 14% de los pacientes que presentaban algún trastorno mental habían sido enviados a un profesional especializado. El estudio se llevó a cabo con 1.000 participantes en cuatro puntos del país.La próxima primavera, la Asociación Psiquiátrica de EE UU, publicará el primer manual de diagnósticos para facultativos de medicina general. Será un instrumento que ayudará a los médicos de cabecera, ginecólogos y pediatras a diagnosticar formas graves de enfermedad mental, así como problemas diversos, como abusos o dificultades conyugales.
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