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El Servicio Nacional de Productos Agrarios liquida los excedentes para bajar precios

El Servicio Nacional de Productos Agrarios (SENPA), como organismo de intervención de la Unión Europea, ha vendido la mayor parte de las existencias de productos agrarios con el fin de rebajar los precios de los productos en origen en el mercado interior. Éstas operaciones de liquidación han afectado fundamentalmente a la cebada, con unas ventas desde septiembre superiores a las 700.000 toneladas, 90.000 toneladas de centeno y otras 44.000 toneladas de aceite de oliva que han dejado vacíos los almacenes de la intervención.Por primera vez en los últimos años, consecuencia de la baja cosecha de cereales y a pesar de la reducción en la demanda por el descenso de algunas cabañas ganaderas como el porcino, la Administración inició la venta de cebada en los meses de otoño ante la existencia de una escalada de precios. La fuerte demanda ha hecho que las cotizaciones en el campo se hayan situado hasta las 23 pesetas para la cebada frente a un precio de intervención en torno a las 21 pesetas.

Las operaciones de venta del organismo de, intervención han tenido una acogida espectacular con compras tanto desde grupos multinacionales como por parte de pequeños ganaderos con unos precios que han superado las 23 pesetas kilo a pie dé almacén del SENPA.

En medios de la Administración se espera que esta tendencia alcista de los precios se frene también con la entrada en los próximos meses de los dos millones de toneladas de maíz y las 1300.000 toneladas de sorgo estadounidense que debe importar cada año España. El acuerdo GATT ha consolidado este compromiso impuesto en su día por la Comunidad Europea..

Junto a la cebada, destacan igualmente las ventas de aceite de oliva que ascendieron a 44.000 toneladas y que han dejado a la Administración sin existencias. La primera operación de venta de 14.000 toneladas el pasado mes de septiembre estuvo muy repartida, aunque firmas españolas medianas como Aceites Toledo se hicieron con importantes partidas. Sin embargo, en la última subasta de 30.000 toneladas, solamente tres firmas se hicieron con todo el producto.

El grupo Ferruzzi (Koipe-Elosúa-Carbonell) adquirió 18.000 toneladas seguido de Unilever con 6.000 toneladas y otras 6.000 del grupo público Coosur. Las tres firmas han ofertado unos precios en torno a las 50 pesetas por encima de los fijados este año como de intervención pagando en torno a las 370 pesetas por kilo.

Estas ventas de aceite al alza, al menos en un primer momento, no van a contribuir a bajar los precios en origen hasta los niveles de intervención y podría aumentar los precios al consumo.

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