La economía de Irlanda y Pujol

El pasado 16 de octubre su periódico publicó una entrevista concedida por el presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol. Durante la entrevista, los periodistas de EL PAÍS comentaban que, nada más ser presentado el presupuesto de 1995, la Unión Europea recomendaba a España dedicar los resultados de la expansión a reducir el déficit público. El señor Pujol dijo que Luxemburgo era el único país comunitario que no tenía un déficit excesivo y que no sabía por qué habían aprobado a Irlanda, que tiene algún dato macroeconómico malo. Se refería, supongo, al examen de los déficit presupuestarios de los países miembros de la UE y la recomendación de la comisión de excluir a Irlanda y Luxemburgo de la lista negra de Estados que. no cumplen todavía con los objetivos de reducción de déficit contemplados en los planes de convergencia nacionales.De acuerdo con él Tratado de Maastricht, los déficit presupuestarios no deben sobrepasar el 3% del PIB y la deuda pública no debe ser superior al 60% del mismo. Sin embargo, y es importante que lo sepa el señor Pujol, el tratado afirma que ni el déficit ni la deuda se pueden considerar excesivos si un país progresa firmemente hacia estos objetivos.

El señor Pujol no puede tener queja con la previsión irlandesa del déficit público (en tanto por ciento del PIB) para 1994. Desde 1989 se ha mantenido por debajo del 3% permitido y ahora está en el 2,3%. España está en el 6,7%. No obstante, el volumen de deuda acumulada se sitúa en un 89%. Sin embargo, la comisión ha tomado en cuenta la corrección espectacular del 116% del PIB en 1987 a un 89% en 1994. Si no hubiese sido por la devaluación de la libra irlandesa en enero de 1993, la reducción habría sido superior. El volumen de deuda acumulada española alcanza un 63%, inferior a la irlandesa, pero en lugar de contraerse aumenta anualmente: 66% en 1995 y casi 68% en 1996.

No está mal para un país con aproximadamente la mitad de habitantes que Cataluña.

Embajador de Irlanda.