El austriaco Hans Graf abre una nueva etapa al frente de la Orquesta Sinfónica de Euskadi

La Orquesta Sinfónica de Euskadi ha cambiado de batuta. Después de un año de transición regida por directores invitados, tras la salida de Miguel Ángel GómezMartínez, el austriaco Hans Graf ha asumido el cargo de director titular y ha abierto el periodo de consolidación de una formación de sólo 11 años de historia. "Mi trabajo no trata de cambiar el estilo de unaorquesta", dice. "Pretendo introducir un nuevo color en la programación, ampliar el repertorio y ayudar al público a entender la música un poco mejor, especialmente la del siglo XX".

En la inauguración de su temporada en el País Vasco, Graf se ha comprometido a acercar a la orquesta, al público. En el primer ensayo general abierto al público, dirigió unas palabras a los asistentes para presentar el programa, compuesto por una pieza de Ligeti, una sinfonía de Mozart y La consagración de la primavera, de Stravinski. "Unas pocas palabras pueden acercar al público la música. Dos minutos son suficientes para ofrecer la clave y entender mejor una composición", señala.El contrato del nuevo director titular liga a Graf con la Sinfónica de Euskadi por un período de dos años, ampliable hasta cuatro. Durante este tiempo Graf trabajará con la orquesta al menos doce semanas al año. Para completar este trabajo, el director ayudante, el chino En Shao, se hará cargo de la formación otras seis semanas, siempre dentro de la temporada de abono. Los responsables de la Orquesta de Euskadi buscaron en esta elección de directores una combinación que se adecuara a su carácter abierto, que abarca desde la música de cámara a la sinfónica y la ópera. El resto de la temporada de abono estará cubierto por directores invitados, como Arturo Tamayo, Josep Pons y Jean-Bemard Pommier.

Hans Graf aceptó el cargo de director titular de la Sinfónica de Euskadi sin condiciones y disfruta de libertad para elegir las nuevas piezas del repertorio. Conoce las características de la formación desde hace siete años, ya que en varias ocasiones ha sido invitado a dirigirla. "Es una buena orquesta, que está mejorando con los años", asegura. "Los músicos tienen un buen nivel técnico, pero la dificultad radica en que proceden de escuelas diferentes. El problema es similar en otros países, pero aquí se agrava porque no tienen tradición en la formación de intérpretes. No hay muchos candidatos españoles en las audiciones, así que la orquesta no puede tener un rostro español".

Entre sus planes en el País Vasco, destaca el de dirigir óperas. "Por el momento no ha sido posible", explica, "pero en 1996 dirigiré una ópera en concierto dentro de la Quincena Musical de San Sebastián, y es posible que incluyamos algún título en la temporada de abono".

Graf, de 45 años, heredó la vocación musical de su padre, un profesor de conservatorio en Linz (Austria). Estudió piano y dirección en la Escuela Superior de Graz y realizó cursos de perfeccionamiento con Franco Ferrara y Sergiu Celibidache. Desde septiembre de 1984, ha sido titular de la Orquesta del Mozarteum de Salzburgo.