'Operación Cuba'

Tabacalera se ha metido a fondo en Cuba para garantizar el suministro estable de puros y tabaco en rama después de tres años de malas cosechas, litigios e incertidumbre. La empresa española financiará durante tres años la mitad de la producción de tabaco cubano de exportación, en una inversión que supone una inversión anual de 3.500 millones de pesetas y cuyo primer objetivo es asegurar el suministro de 30 millones de puros y 7.500 toneladas de tabaco en rama, un 15% más que este año. La parte cubana pagará al final de cada temporada con parte de su producción de habanos.La Operación Cuba es algo más que una operación comercial, pues Tabacalera se responsabiliza de 80.000 trabajadores y la mitad de las vegas de tabaco de la isla, incluidas las del Hoyo de Monterrey, en Vuelta Abajo, las mejores del mundo. "Se trata de que los fondos estén en cantidad y a tiempo en el lugar donde se necesitan para garantizar que la cosecha sea buena, lo que luego permitirá a los cubanos satisfacer la demanda creciente de Tabacalera", afirma Javier Plan tada, responsable de los intereses de la empresa española en Cuba.

Del desembolso anual de 3.500 millones de pesetas, el 75% se utiliza en el campo y el 25% en la fase industrial, que la parte cubana paga al final de la temporada con puros y tabaco en rama. Fuentes de Tabacalera calculan que este. año comprará a Cuba tabaco por valor de 50 millones de dólares (unos 6.000 millones de pesetas), por lo que, cuando reciba el producto, todavía la empresa española deberá pagar una diferencia de aproximadamente 20 millones de dólares.

Tradicionalmente, Tabacalera compraba en Cuba 30 millones de puros y 6.000 toneladas de tabaco en rama al año, pero en los úItimos tiempos las ventas se redujeron a 25 millones de puros y 4.500 toneladas de rama. Esto se debió principalmente a la caída del campo socialista, de donde procedían la mayor parte de los fertilizantes y los suministros de la isla. Ello hizo que la producción de tabaco bajase en más de un 50%, lo que, sumado al enfrentamiento entre Tabacalera y Cubatabaco por el control de 10 marcas de habanos, provocó en 1993 el peor enfrentamiento que recuerdan los fumadores españoles.

Pero la llegada de una nueva administración a Tabacalera el año pasado permitió que ambas compañías superasen rápidamente sus problemas. Así, en noviembre, Tabacalera y Cubatabaco firmaron un convenio que establece nuevas formas de cooperación, y que obliga a la empresa española a- prefinanciar durante tres años la producción de la mitad del tabaco cubano de exportación. A cambio, la Administración cubana asegura el suministro de cantidades crecientes de habanos y tabaco en rama. Todos los cigarrillos negros de Tabacalera, desde el Ducados hasta el Habanos, llevan mezcla de tabaco cubano.

La colaboración empezó el pasado 5 de julio, cuando llegó a la isla el primer barco cargado con fertilizantes para preparar las vegas y los semilleros. El fertilizante se había convertido en la principal preocupación de los campesinos cubanos tras la desintegración de la Unión Soviética, pues, al no llegar a tiempo, durante los últimos cuatro años afectó el rendimiento de la cosecha.

Suministros

La Operación Cuba implica que Tabacalera participa en todo el proceso productivo, y por ello, además de 25.000 toneladas de fertilizante, suministra combustible y lubricantes por valor de tres millones de dólares, sogas para 16.000 yuntas de bueyes, neumáticos, baterías y piezas de repuesto para la maquinaria agrícola, lo que permitirá echar a andar más de 350 tractores, parados desde la caída socialista.También madera conífera de Canadá y 75 toneladas de clavos para reparar las casas de curado de tabaco, muchas de las cuales se encuentran en mal estado, alambre espinoso, zapatos, ropa de trabajo para los campesinos y machetes para cortar yagua, producto con el que tradicionalmente se embalan las pacas de tabaco en rama para exportar.

Pero la Operación Cuba no se limita a lo agrícola, y por ello, Tabacalera proporciona también fibra de algodón para producir la tela de los tapados, donde se cultiva la capa selecta que envuelve los habanos, e insumos para la fase industrial, como respuestos de maquinaria de impresión, papel, cartulina, tinta, bisagras y material de impresión para la confección de las cajas de puros y sus respectivas vitolas y marcas.