Una avioneta burla todos los filtros de seguridad y se estrella contra el jardín de la Casa Blanca
Una avioneta se precipitó en la madrugada de ayer sobre la Casa Blanca, la residencia oficial del presidente de Estados Unidos, burlando todas las medidas de seguridad del que se supone que es uno de los lugares más protegidos del mundo. El episodio, que parece ser un atentado suicida o la acción desesperada de un perturbado mental, no llegó a poner en peligro la vida de Bill Clinton porque éste pasaba la noche junto a su familia en la casa donde habitualmente duermen los invitados extranjeros, a la que se trasladaron hace días mientras se realizan obras en la mansión presidencial.
El sorprendente suceso tuvo lugar poco antes de las dos de la mañana (ocho de la mañana en Madrid). Según la versión de la policía y de testigos presenciales, un avión de un solo motor que sobrevolaba a esa hora la zona del Mall, un enorme parque que une el Capitolio y el monumento a Lincoln, giró de repente sobre la Casa Blanca y acabó estrellandose contra un viejo magnolio del jardín del ala sur, donde se celebran actos oficiales. De acuerdo a los primeros datos, el avión llevaba las luces encendidas, pero había apagado previamente los motores, lo que seguramente dificultó que fuera detectado por los radares que vigilan el área. Otro elemento que contribuyó a burlar la seguridad fue el hecho de que la avioneta volaba a muy baja altura cuando se aproximó a la Casa Blanca.Los restos del aparato quedaron dispersados en una zona próxima a las habitaciones privadas de los Clinton. El piloto, que falleció en el acto, ha sido identificado como Frank Eugene Corder, de 39 años, originario del vecino Estado de Maryland. Según algunas versiones, el protagonista de tan insólito vuelo, que parecía tener antecedentes de enfermedad mental, fue degollado por una pieza de su avión.
El presidente Clinton, que fue informado del percance por su jefe de Gabinete, Leon Panetta, unos 15 minutos después de ocurrido, echó un vistazo al lugar donde cayó la avioneta antes de incoporarse a su despacho. En su primera reacción, dijo que toma el incidente con la seriedad que merece, pero aseguró que la Casa Blanca permanecerá "segura y abierta".
Los canales de televisión han informado de que el Servicio Secreto, ha comprobado que el avión, de la marca Cessna, procedía de un pequeño aeropuerto de Maryland. El aparato fue robado esa misma noche en un club de vuelo, lo que respalda la tesis de que podría tratarse de una acción planeada por un desesperado que quería llamar la atención.
El secretario de Transportes, Federico Peña, declaró que, hasta que no concluya la investigación, era prematuro aventurar los motivos de este suceso.
La familia de Clinton debía haber dormido el domingo en la Casa Blanca, después de pernoctar desde el miércoles en la Blair House mientras se efectuaban reparaciones en el aire acondicionado de la mansión presidencial. Un imprevisto retraso en esas obras obligó a la familia del presidente a quedarse un día más en la casa de los invitados extranjeros. En todo caso, el impacto del avión no afectó a las habitaciones privadas de la Casa Blanca.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.