Los boniteros, divididos, mantienen el bloqueo y piden una reunión urgente con el ministro

Los boniteros del Cantábrico decidieron, a la 1.30 de esta madrugada, mantener el bloqueo y solicitar una reunión urgente con el ministro Luis Atienza, pues consideran que José Loira, secretario general del Pesca, "no es un interlocutor válido". Con el resultado de esa reunión, de la que esperan explicaciones convincentes de Atienza sobre cuál será la actuación futura de la Administración, convocarán una nueva asamblea, probablemente en Santander, para votar el desbloqueo.La decisión no resultó fácil. La reunión entre los boniteros comenzó a las 21.30 de la noche, y el tono y volumen de las discusiones fue subiendo con el paso de las horas. Los representantes de Galicia y Asturias apostaban por concluir con el cierre de los puertos. En el lado opuesto, los representantes de Guipúzcoa y Vizcaya defendieron mantenerlo e, incluso, endurecer las medidas de presión. En el medio, los armadores cántabros se alineaban con gallegos y asturianos mientras que sus tripulaciones apoyaban la propuesta vasca. Las discusiones se zanjaron con un fax al ministro y la esperanza de que sus razonamientos permitan volver pronto a faenar.

La entrada a los principales puertos comerciales del norte seguía ayer bloqueada por segundo día consecutivo por una media de 50 boniteros. Los armadores del País Vasco han conseguido paralizar el tráfico de mercancías y pasajeros en Pasaia, Hondarribia, Bilbao y Hendaia, informa Aitor Guenaga.

Las tareas de control realizadas por la Ertzaintza (policía autonómica vasca) para supervisar la legalidad del pescado importado continuaron ayer.

El buque insignia de la organización ecologista Greenpeace Rainbow Warrior ha puesto rumbo hacia las costas gallegas para denunciar las actividades ilegales de las flotas de redes de deriva que faenan en el Atlántico Norte. Se estima que unos 700 barcos europeos utilizan este tipo de artes para la pesca.

En Gijón, el bloqueo protagonizado por barcos pesqueros de Asturias y de Galicia impidió ayer el acceso al puerto de El Musel de dos cargueros que transportan carbón y mineral de hierro, informa Javier Cuartas. Los dos buques permanecen fondeados frente a la bocana, a la espera de que se levante el bloqueo. Otro barco butanero, con pabellón de Liberia, espera en el muelle a poder zarpar.

Mientras, el arrastrero Francisco y Begoña -apresado y sancionado la semana pasada en Francia- llegó anoche al puerto de Ondárroa.