_
_
_
_
_

Felipe González reconoce su sorpresa por el energico apoyo de los nacionalistas a su Gobierno

Felipe González reconoció ayer en la isla griega de Corfú en donde participa desde hoy en la cumbre de la Unión Europea (UE), que no se esperaba un apoyo tan claro a su Gobierno como el que le brindaron el miércoles en Bruselas los nacionalistas Xabier Arzalluz, del PNV, y Antoni Duran i Lleida, de Unió Democrática de Catalunya (UDC), poco antes de cenar con el presidente de¡ del Partido Popular (PP), José María Aznar.

Al término de un almuerzo de los líderes del Partido de los Socialistas Europeos (PSE), del que forma parte el PSOE, el presidente del Gobierno reconoció que no contaba "tal y como estaba expresado" con un respaldo tan contudente de los nacionalistas. "Pero lo han expresado con absoluta claridad, lo que me parece muy bien", añadió. González reiteró que solicitar elecciones generales anticipadas, como hace José María Aznar, "es un error desde un punto de vista político".Aunque los Presupuestos Generales del Estado para el año 1995, que se empezarán a negociar con las fuerzas parlamentarias que apoyan al Ejecutivo, "serán restrictivos", Felipe González prevé que se llegará fácilmente a un acuerdo. "No he visto nunca que sea algo muy dificil de lograr", manifestó.

Raimon Obiols, primer secretario del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), restó también ayer importancia a la cena que celebraron el miércoles por la noche en Bruselas los máximos dirigentes del Partido Popular, el PNV y Unió Democrática. "No me parece que se está produciendo un acercamiento, sino un incremento de la distancia con dureza", declaró Obiols a la salida de la reunión de los líderes del PSE a la que asistió en lugar del presidente del Gobierno, Felipe González, que sólo participó en el almuerzo final.Predominio nórdicoEsta primera ausencia de Felipe González en una reunión de estas características suscita todo tipo de especulaciones. Un asesor parlamentario indicó que al secretario general de los socialistas españoles le daba "cierta pereza" intentar evitar en solitario que las conclusiones de los debates de ayer estuviesen demasiado influidas por, sus correligionarios británicos y nórdicos. Mermados por los resultados de las elecciones europeas, los socialistas italianos y franceses juegan ahora un papel secundario.

Según Raimon Obiols, las dos fuerzas nacionalistas -Convergencia i Unió y el PNV- han dicho ahora "con más énfasis que no es conveniente adelantar las elecciones, fundamentalmente porque el objetivo número uno es la reactivación económica".

Esta actitud, prosiguió Obiols, "contrasta con la del Partido Popular, que quiere gobernar y está insistiendo mucho en el tema" a pesar de que "el cuadro institucional se está consolidando" en España "y la reactivación económica se reafirma". "Y esto no es bueno para los intereses del Partido Popular".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_