El democristiano Eduardo Frei asume la presidencia de Chile

El democristiano Eduardo Frei Ruiz-Tagle, que en diciembre fue elegido con el 58% de los votos, asumió ayer la presidencia de Chile por un periodo de seis años, en sustitución de su correligionario Patricio Aylwin, en una ceremonia efectuada en el edificio del Congreso, en Valparaíso. Ocho presidentes latinoamericanos, delegaciones de 100 países y 1.200 invitados asistieron a la ceremonia.El primer relevo presidencial en Chile desde 1970 protagonizado por dos mandatarios elegidos en las urnas careció del dramatismo que en 1990 tuvo el traspaso del poder por parte del general Augusto Pinochet al presidente Patricio Aylwin. Éste se retiró sonriente y en medio de una ovación de todos los sectores, después de cuatro años de Gobierno en los que casi no sufrió desgaste ninguno.

La coalición democristiana y socialista inició ayer su segundo Gobierno consecutivo con las metas de mantener el crecimiento de la economía y profundizar en la democracia.

De los 21 ministros, 10 son democristianos, incluidos los que asumen las carteras claves de Relaciones Exteriores y Defensa. Éstas quedaron en manos de Carlos Figueroa y Edmundo Pérez, respectivamente.

La presencia de Pinochet en la ceremonia no provocó manifestaciones, salvo abucheos en el exterior del Congreso. El nuevo presidente se retiró en un coche descubierto y fue aclamado en el camino por cientos de personas.

Carrera rápida

Frei, un ingeniero de 51 años, hijo del fallecido ex presidente Eduardo Frei, que gobernó entre 1964 y 1970, hizo una rápida carrera política en la etapa final de la dictadura. Después de la muerte de su padre se retiró de la actividad empresarial y se incorporó a la campaña para impedir el intento de Pinochet de perpetuarse en el poder.

Elegido en 1989 senador con la más alta mayoría del país y después presidente de su partido, Frei derrotó al izquierdista Ricardo Lagos en las primarias de la coalición gobernante. En la campaña presidencial se impuso con el mayor respaldo que ha logrado ningún presidente chileno en las últimas cuatro décadas. Poco antes del relevo presidencial, se renovaron las presidencias de ambas cámaras con los parlamentarios elegidos en diciembre pasado.

A Frei le corresponderá durante su Gobierno, en 1997, el momento en que Chile saldará sus cuentas con el pasado: la retirada de la jefatura del Ejército del general Pinochet, quien como ex presidente podrá incorporarse al Senado. Las reformas constitucionales para eliminar los senadores designados y el sistema de elección binominal y recuperar el derecho presidencial de renovar los jefes de las Fuerzas Armadas son los principales temas pendientes de la transición.

Por otra parte, la decisión de Aylwin de indultar a cuatro presos políticos del régimen militar, entre ellos los que participaron en el atentado contra Pinochet en 1986, desató una polémica. El Ejército y la derecha criticaron la medida, uno de los últimos actos del Gobierno saliente, aunque le reconocieron el derecho a conceder el indulto.

Los cuatro presos políticos esperan la promulgación de la medida para partir rumbo a Bélgica, que los acogió por consideraciones humanitarias, según afirmó el embajador de este país en Chile.