_
_
_
_
Reportaje:

Picasso, termómetro del mercado del arte

El índice de cotización en las obras del artista malagueño revela una tendencia hacia la estabilización

Los últimos días de 1993 pueden permitir mirar con alivio por encima del hombro a lo que va de temporada en el mercado del arte. Ha habido algunas ventas a precios sorprendentes y, en general, siguen siendo los impresionistas quienes han dominado las preferencias de los coleccionistas. Pero tampoco queda atrás la obra de Picasso, que el pasado mes de noviembre subió las bajas temperaturas en las subastas con 88 trabajos del artista vendidos en una sola sesión por un valor de 4.000 millones de pesetas. El artista malagueño está considerado como la figura más sólida del arte moderno, y la evolución de sus obras en el mercado es un verdadero termómetro de la situación general.Las temporadas de primavera y otoño han dado un respiro al mercado del arte internacional. El brusco golpe de la recesión en los dos últimos años parece una pesadilla del pasado y, sin la exagerada explosión de finales de los ochenta, se va adquiriendo cierta estabilidad. Lo importante es que surjan buenas obras que vender. Ha habido alguna sorpresa en los últimos dos meses, como el collage de Matisse La prensa de vino, vendido por 1.849 millones de pesetas en Nueva York. Sin contar con las dos otras estrellas del 93 en las subastas internacionales: Naturaleza muerta: las grandes manzanas, de Cézanne, vendida por 3.382 millones de pesetas, y otro Matisse, La mulata Fatma, por 1.691 millones de pesetas. Monet, Renoir y Degas también han elevado el tono de un año salpicado de buenas obras que cambiaron de mano con la satisfacción tanto de los nuevos como de los viejos propietarios.

Más información
Caballo de leyenda

Pero la señal de un interés renovado de los coleccionistas por volver *a adquirir obras de arte quedó más clara tras la subasta de Sotheby's en Nueva York de la colección Stanley Seeger hace un mes, en la que se vendieron 88 obras de Picasso por un precio global de 4.000 millones de pesetas.

La sesión de esta subasta recordó los intensos momentos que en la década pasada llevaron los precios de las obras de arte a una altura mucho mayor que las optimistas previsiones de la casa organizadora. Durante cerca de tres horas, las pujas por los picassos de Seeger convirtieron la sala en un civilizado mercado de tiburones. Lo cierto es que se trataba de una colección con algunas piezas muy valiosas. La publicación mensual especializada The Arts Newspaper considera en su último número que esta subasta indica la existencia de mucho dinero fresco en busca de inversiones seguras en arte, y titulan su artículo: Los ricos ya no pueden esperar más.

"Picasso está considerado como un puerto seguro", comentó después de la subasta un galerista. "Hay mucho dinero por ahí en este momento, mucha gente ansiosa de volver a invertirlo en el mercado del arte antes de que sea demasiado tarde. Entre las bajas estimaciones que hubo en esta subasta y el nombre de Picasso se encontraba una serie de obras que ni siquiera eran frescas para el mercado, y, sin embargo, se vendieron. Por las piezas realmente buenas hubo un auténtico frenesí".

La procedencia de las obras es siempre un dato a tomar en cuenta. Stanley Seeger, un norteamericano que vive desde hace años en Europa, decidió poner a la venta la colección que había venido reuniendo cuidadosamente a lo largo de varias décadas. Ni siquiera era una colección conocida por los especialistas, porque Seeger se dedicó principalmente a rastrear Y, comprar obras que Picasso había regalado a sus amigos. Su admiración por dos grandes coleccionistas de picassos, Gertrude Stein y Douglas Cooper, le llevó también a buscar piezas que hubieran formado parte de las colecciones de alguno de ellos.

Mujer y niños a la orilla del mar se vendió por 594 millones de pesetas a un coleccionista norteamericano, no identificado. El galerista y coleccionista Heinz Berggruen compró tres obras para su colección, actualmente en préstamo a la National Gallery de Londres. El dibujo Retrato de Ángel Fernández de Soto fue una de las mayores sorpresas, al adjudicarse por 72 millones de pesetas, cinco veces más que el precio estimado.

Sin ser, naturalmente, el único punto de referencia, las obras de Picasso pueden considerarse un índice fiable para orientarse en el mercado. A pesar de que él ya en vida pudo gozar de los beneficios de ver su obra perfectamente situada, y aunque los precios suelen subir notablemente después de la muerte del artista, el caso de Picasso ha tenido una evolución distinta. Después de su muerte, en 1973, y entre 1975 y 1980, el número de obras de Picasso en el mercado se duplicó, aunque ese exceso -producto de obras de sus herederos y otra gente que vio la oportunidad de obtener mayores beneficios por sus obras- no hizo más que saturar la oferta y mantener los precios al mismo nivel. El prolífico maestro había producido tanto que no cesaban de aparecer obras suyas, muchas de ellas de dificil catalogación. La lista definitiva de obra de Picasso realizada por Christian Zervos consta de 33 volúmenes.

El índice actualizado de cotización de las obras de Picasso ha subido este año casi al nivel que tenía en 1987, cuando se empezaba a empinar el pico del boomque se alcanzaría en 1989. Este índice muestra, sobre una base de 1.000 en el año 1975, los promedios de obras vendidas y su valor en el mercado cada año enrelación a éste.

Tal vez se pueda hablar ahora de un verdadero encuentro entre la situación del mercado y la valoración de la obra de Picasso. En un momento como el actual, sólo la oferta de obras de los grandes maestros ofrece la confianza a los impacientes coleccionistas que no alejan de su pensamiento el realizar además una buena inversión.

José de Paz, consejero delegado de Sotheby's Peel en España, piensa que estamos entrando en una fase de estabilización. "Este año ha habido un afianzamiento del mercado y sus cotizaciones", dice. "En España vamos con cierto retraso en relación a Londres, Nueva York o Ginebra, pero ya se ha dejado sentir en el último trimestre una recuperación, especialmente en el arte contemporáneo".

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_