Los Doce debaten la puesta en práctica de corredores humanitarios en Bosnia

La Unión Europea (UE) va a aprobar los planes para establecer corredores humanitarios en Bosnia ahora que el invierno empieza a tener efectos devastadores sobre la población civil. Los ministros de Exteriores de los Doce se reúnen hoy en Luxemburgo para debatir el asunto y enviar una señal al Gobierno de Serbia de que las sanciones internacionales podrían ser suspendidas si los musulmanes bosnios obtienen mayores concesiones territoriales.

La población bosnia empieza a sentir los efectos del invierno y la suspensión de los convoyes de ayuda. El aeropuerto de Sarajevo, la capital de Bosnia, fue reabierto ayer tras su clausura el sábado a causa de la nieve y las autoridades han pedido a la población que ayude a distribuir el pan en carretillas. Los convoyes con ayuda humanitaria reanudarán el transporte a Bosnia central el miércoles, tras cuatro semanas de interrupción debido a la muerte de un conductor danés en un ataque con morteros.Los planes de los Doce representan la primera acción común de la PESC (política exterior y de seguridad común), resultado de la entrada en vigor del Tratado de Maastricht. Los ministros debatirán también el plan franco-alemán de doble conferencia de paz para la antigua Yugoslavia, que implica ofrecer una salida política a Serbia y Montenegro a cambio de su cooperación en el logro de la paz.

Los aspectos militares de la acción común de la PESC serán el principal tema de debate del Consejo de la Unión Europea Occidental (UEO), una vieja e inactiva institución de la guerra fría resucitada por el Tratado de Maastricht, que la considera cómo destinada a elaborar y poner en práctica "las decisiones y acciones de la Unión que tengan repercusiones en el ámbito de defensa".

La UEO realizará hoy su primera actuación bajo las nuevas reglas de juego que marca la UE. Los ministros de Exteriores y de Defensa de los nueve países miembros (Alemania, Bélgica, España, Francia, Italia, Luxemburgo, Holanda, Portugal y Reino Unido), se reunirán por primera vez junto a la presidencia semestral de turno del Consejo de Ministros de la UE y con el comisario de Exteriores, Hans van den Broek, en un ejercicio de estricta aplicación del Tratado de la Unión.

La reunión está acompañada de algunas ambigüedades, empezando por su propia presidencia. La UEO cuenta con su propio turno presidencial, anual y no semestral como la UE, que ahora se halla en manos de Luxemburgo. De ahí que la reunión de los ministros de Defensa y Exteriores se celebre en el Gran Ducado en vez de en Bruselas, como es habitual. También asistirán a la reunión los ministros de Grecia, cuya incorporación está en proceso de ratificación, y de Irlanda y Dinamarca, que tienen el estatuto de observadores, aunque este último país obtuvo una derogación a Maastricht que le permite descartar su incorporación a la defensa común. Los ministros pondrán a punto el sistema de trabajo entre la UEO y la UE, la coordinación entre sus secretarías y la presencia mutua de cada organización en la otra.