Veneno del tétanos y el botulismo para conocer el sistema nervioso
El botulismo es un tipo particularmente grave de envenenamiento por alimentos, que se asocia a menudo a los productos enlatados. La víctima muere a consecuencia de la parálisis. El tétanos mata de la misma forma. En un informe del número del 9 de septiembre de la revista Nature se explica cómo el estudio de casos de estas dos graves enfermedades ha permitido conocer uno de los secretos mejor guardados del cuerpo humano, la forma en que una señal nerviosa salta de una célula nerviosa a la siguiente.Los malos de la película, tanto en el botulismo como en el tétanos, son bacterias del género Clostridium (respectivamente, Clostridium botulinum y Clostridium tetani) que no pueden sobrevivir en exposición al oxígeno durante mucho tiempo. Por eso les gustan ambientes libres de oxígeno como el interior de las latas. Actúan segregando venenos. De hecho, la toxina del botulismo es uno de los venenos naturales más potentes conocidos.
Los venenos actúan directamente sobre el sistema nervioso. De hecho, se centran en las uniones, o sinapsis, existentes entre una célula nerviosa y otra. Las señales nerviosas deben cruzar las sinapsis para que su mensaje llegue al cerebro y vuelva. La entrada del veneno en este tráfico constante es lo que provoca la parálisis.
Sólo en los últimos meses los científicos han podido empezar a vislumbrar los detalles bioquímicos de la transmisión sináptica, y una de sus herramientas ha sido precisamente las neurotoxinas de Clostridium, aunque han trabajado sobre células nerviosas aisladas y no sobre personas.
Neurotransmisores
Reinhard Jalin, de la Universidad de Yale (Estados Unidos), y sus colegas han encontrado que la neurotoxina del botulismo tipo A-existen al menos siete variedades- está estructurada especialmente para destruir una proteína, encontrada recientemente, que tiene un papel esencial en la transmisión sináptica. Ya se sabía que la tipo B y la del tétanos atacan otra proteína de la sinapsis, y están surgiendo nuevos resultados que relacionan otras neurotoxinas con proteínas determinadas.
La señal eléctrica que recorre una fibra nerviosa se convierte en una sustancia química llamada neurotransmisor, que es la que atraviesa la sinapsis para luego volver a convertirse en señal eléctrica en la siguiente célula nerviosa..El neurotransmisor va empaquetado en pequeñísimas burbujas o vesículas que se trasladan a la superficie-de la célula, donde se fusionan con la membrana y descargan en el exterior.
Las proteínas atacadas por las neurotoxinas son parte esencial de este proceso de fusión vesicular sin el cual no se transmiten los mensajes nerviosos. Así, las neurotoxinas, al actuar de forma específica sobre proteínas determinadas de la sinapsis, han permitido profundizar en este mecanismo esencial.
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