Descubierto en Managua otro importante depósito clandestino de armas
Las fuerzas de seguridad de Nicaragua descubrieron el sábado en Managua el más importante escondrijo clandestino de armas encontrado hasta ahora. En esta ocasión, las armas pertenecían a la guerrilla guatemalteca y junto a ellas han sido aprehendidos un moderno sistema para recibir mensajes y un radiotransmisor.
El hallazgo, anunciado ayer por el ministro del Interior, Frank César, ha coincidido con unas nuevas declaraciones de la presidenta, Violeta Chamorro, en las que reitera su decisión de relevar al general Humberto Ortega como jefe del Ejército.
El nuevo descubrimiento contribuirá a aumentar las presiones sobre el Ejército nicaragüense, cuyos mandos proceden de la época sandinista y a cuya relevo ha condicionado EE UU la reanudación de ayuda económica al país centroamericano.
La presidenta nicaragüense informó del descubrimiento del arsenal a su homólogo de Guatemala, Ramiro de León.
En el depósito fueron requisados más de un millar de fusiles de asalto y metralletas de fabricación diversa (Fal, Galil, M-16, Ak y otras), seis lanzacohetes RPG-7, una ametralladora antiaérea, tres fusiles lanzagranadas M-79, cinco cañones de 57 milímetros, 22 morteros y ocho minas. Han sido detenidas dos personas de nacionalidad guatemalteca.
El pasado mes de mayo se incautó otra importante cantidad de armas destinadas a la antigua guerrilla salvadoreña. Hasta ahora, las autoridades de Nicaragua han encontrado 23 depósitos clandestinos de armas en todo el país. La mayoría de ellos parecen haber sido instalados en los años ochenta, durante la guerra civil entre el Gobierno sandinista y la Contra.
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