El caos fuerza la retirada de las organizaciones humanitarias

Las organizaciones humanitarias han evacuado con gran rapidez a su personal destinado en Somalia ante el brusco deterioro de la situación. El caos parece adueñarse de las calles de Mogadiscio. Las instalaciones del aeropuerto y los alrededores de la Embajada de Estados Unidos, que se emplea como cuartel general de los cascos azules, fueron escenario, en la noche del miércoles-, de nuevos tiroteos entre guerrilleros somalíes y tropas de la ONU. Mientras, la ciudad se llenó de panfletos contrarios a las fuerzas de las Naciones Unidas. El ataque de los partidarios del jefe guerrillero Fará Aidid no causó víctimas entre los cascos azules, según señaló ayer un portavoz de las fuerzas de la ONU en Somalia (Onusom).Fuentes de las organizaciones humanitarias que han llegado a Nairobi, la capital de Kenia, han manifestado que los intereses militares prevalecen sobre los de la distribución de la ayuda, al tiempo que han mostrado su preocupación por las recientes muestras de fuerza realizadas por las tropas norteamericanas. De hecho, la inseguridad que vive Mogadiscio ha interrumpido cualquier esfuerzo de distribución de alimentos.

Nueva manifestación

Alrededor de 2.000 partidarios del jefe guerrillero Aidid se manifestaron ayer para protestar por el ataque lanzado por tropas de Estados Unidos contra la vivienda de un lugarteniente del citado señor de la guerra. La ONU ha ofrecido una recompensa de 25.000 dólares (más de 3 millones de pesetas) por la captura de Aidid. Los manifestantes portaban grandes pancartas que ilustraban la matanza norteamericana y con textos como "Esta acción muestra las decisiones de la Administración de Bill Clinton y de las Naciones Unidas contra la paz en Somalia" y "Sí a la paz, no a Howe", en referencia al almirante estadounidense representante especial de las Naciones Unidas en Somalia.El general Aidid se dirigió ayer en una alocución a sus seguidores, utilizando una emisora de radio clandestina, para pedirles que no confundieran en sus acciones militares a los periodistas con las fuerzas de la ONU.

Los seguidores de la Alianza Nacional Somalí, de Aidid, convocaron la manifestación desde altavoces instalados en vehículos que recorrieron las calles de Mogadiscio. La convocatoria anunciaba a los "periodistas invitados" que serían acompañados durante la marcha por responsables de esta organización, la ANS. Dos helicópteros de las fuerzas de las Naciones Unidas sobrevolaron la manifestación de Mogadiscio, que transcurrió sin ningún tipo de incidentes.

Cuatro periodistas extranjeros y 35 cascos azules han muerto en Somalia desde el pasado 5 de junio. La cifra de víctimas somalíes es bastante más elevada y difiere, según las distintas fuentes. Los portavoces de las organizaciones humanitarias la estiman en cerca de un centenar.