El aumento del gasto en incapacidad laboral se redujo a la mitad en 1992

El aumento del gasto en incapacidad laboral transitoria (ILT) se redujo a la mitad en 1992, al pasar de un crecimiento del 20% en los últimos años al 10% del año pasado, según datos provisionales del Ministerio de Trabajo recopilados por UGT. El coste de las bajas temporales en 1992 ascendió a 451.960 millones, según estos datos.

El recorte impuesto por el Gobierno el pasado mes de julio ha frenado la tendencia al crecimiento del gasto en ILT que sumó 451.960 millones de pesetas en 1992, un 10% más que en 1991. Este recorte consistió en transferir a los empresarios el coste de la baja de un trabajador del cuarto al decimoquinto día de enfermedad que antes correspondía al Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS). Luis Martínez Noval, en la actualidad ministro de Trabajo en funciones, explicó el pasado verano que" el gasto en ILT se estaba desviando preocupantemente al alza y podría alcanzar los 547.000 "si no se corrigiese su evolución".El Gobierno calculó entonces que se ahorraría con esta medida 75.000 millones de pesetas y la CEOE estimó que les costaría el doble, 150.000 millones. El gasto en ILT suponía en 1989 el 5,02% del Producto Interior Bruto frente a la media comunitaria del 6,05%, según datos de la Seguridad Social. El Ministerio de Trabajo no quiere hacer ninguna valoración al respecto hasta presentar los datos del ejercicio cerrado de 1992.

La tendencia de esta partida no ha parado de aumentar en los últimos años. En 1989, 1990 y 1991 el dinero que la Seguridad Social destinaba a ILT crecía a un ritmo del 20% anual. De los últimos meses del año pasado, el que registró un incremento mayor de gasto fue en diciembre, que requirió 139.295 millones mientras que en noviembre fue 44.173 millones.

Cuando el Gobierno decidió transferir a los empresarios el pago del subsidio de la ILT de 12 días, la duración de los procesos de baja por enfermedad era de 43 días y a final de año ascendió a 57,26 días, según datos recopilados por Analistas de Relaciones Industriales, bajo la dirección de Fabián Márquez, asesor de la CEOE. Según sus datos, en 1988 estos procesos duraban una media de 35,23 días, 37,62 días en 1989 y 40,31 en 1990. Según este grupo de especialistas, la Administración debe afrontar "el control de fraude que se manifiesta en la ILT". Pilar Iglesias, de la CEOE, explica que la inspección sanitaria de las bajas por enfermedad en las autonomías con esta gestión transferida deja mucho que desear.