Medicamentos
El editorial de su periódico Rigor asistencial (15 de abril) encierra una descalificación global de quienes se oponen al Decreto de Financiación Selectiva de Medicamentos, que lleva a pensar que quienes no están de acuerdo con las decisiones del Gobierno carecen del derecho o, al menos, de la razón para opinar.Desde un punto de vista técnico, resulta discutible que la razón que ha llevado al recorte de la prestación farmacéutica sea el porcentaje que ésta representa en el conjunto del presupuesto de la sanidad pública. Por la misma razón, y puesto que se trata de una prestación de la que no tienen queja los usuarios, lo que debería hacerse es incrementar la asignación presupuestaria del resto de las partidas.
En cuanto al tercer punto de su editorial, he de decirle que estamos de acuerdo con la implantación de listas negativas, no sólo porque se haga en países desarrollados. Pero ya que pone a éstos de ejemplo y para equipararnos con ellos, nuestra única discrepancia con el decreto aprobado por el Gobierno español radica en la falta de unas garantías jurídicas suficientes a la hora de defender los laboratorios sus derechos ante la Administración.-
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