Un centenar de puntos negros persiste en 80 playas

El litoral español todavía cuenta con 100 puntos negros no aptos para el baño, distribuidos entre 80 playas. Sin embargo, la situación continúa mejorando desde 1989, fecha en la que el 16,24% de las Zonas de baño costeras era insalubre. Cuatro años después, el informe que el Ministerio de Sanidad y Consumo envía a la Comunidad Europea revela el buen estado del 92,5% de las zonas de baño del litoral español. Al menos 50 puntos negros de 1991 han desaparecido un año después, especialmente en Asturias, que exhibe playas más limpias.

Mientras unas playas se recuperan para el baño, otras, por circunstancias que no aparecen explicadas en el informe, son calificadas con un cero en su calidad higiénico-sanitaria. Es el caso de Baleares, una comunidad tradicionalmente ausente de las listas de puntos negros y que en 1992 figura con una tramo de la playa de Pollença (Mallorca).Es esperanzadora la mejoría experimentada en las costas de Asturias, de la que han desaparecido hasta 15 puntos negros, si bien se señalan otros nuevos, como la playa Cuevas del Mar en Llanes, y San Lorenzo, en Gijón. La famosa playa de La Franca, en Rivadeva, los dos años anteriores considerada no apta para el baño, obtuvo en 1992 una buena calificación.

El País Vasco sigue mostrando la situación más catastrófica en cuanto al estado de sus playas. Repiten calificación cero la mayoría, y además, se añaden cuatro nuevas zonas de baño contaminadas en Vizcaya.

Cantabria, una de las autonomías con playas más limpias, registraba en 1991 unos altos índices de contaminación en la playa de La Concha, en Suanzes. Sin embargo, dicho enclave no aparece ni siquiera mencionado en 1992. Aunque el informe no lo aclara, puede tratarse de una de las 30 o 40 zonas que han sido descalificadas definitivamente para el baño en los últimos años, según explica Juan José Franciscó Polledo, director general de Salud Pública. El técnico del ministerio asegura que en las zonas mencionadas existen controles y señalizaciones para que no se bañen los ciudadanos.

Gerona, que tampoco aparecía en anteriores informes, obtuvo calificación sanitaria cero en sus playas de L'Estartit, Gran y Cala Canyelles. En Barcelona y Tarragona la situación es muy parecida a la del año anterior. Castellón sólo repite en la playa de El Pinar, pero añade la playa del Gurugú. En Valencia se han rehabilitado algunas zonas, aunque también aparecen problemas en otras.

En cuanto a Andalucía, Granada es la provincia que más ha mejorado en un año. De los siete puntos negros que tenía en 1991, sólo aparecen dos. En Málaga, Almería y Cádiz la situación no ha experimentado grandes variaciones.

Marea negra

En el momento de efectuar los análisis del litoral correspondientes a 1992, La Coruña presentó una notable mejoría respecto a 1991. Sólo repite en el informe uno de sus siete puntos negros, y se añade la playa de Santa Cruz, en Oleiros. La regeneración de las playas de la ría de Ferrol, afectadas por la marea negra del petrolero Mar Egeo, prevista para estos días, se demorará un par de meses debido al retraso en las tareas de recuperación de los bancos marisqueros, según la demarcación de Costas de Galicia, informa Poco tiempo después del embarrancamiento del Mar Egeo en la península de la torre de Hércules, en La Coruña, el ministro de Obras Públicas y Transportes, José Borrell, se comprometió a que las playas afectadas por el petróleo estuviesen limpias antes de la temporada veraniega. Según Eduardo Toba, jefe de la demarcación, ya están contratadas las obras de aportación de 300.000 metros cúbicos de arena para distintas zonas de las rías de Ferrol, Ares-Betanzos y La Coruña, destinados a la regeneración, de los arenales, tanto para su uso recreativo como para mantener y mejorar la capacidad productiva marisquera.

En la ría de Ferrol, la más afectada por la marea a causa de la acción de los vientos y las corrientes marinas en los días del siniestro, la Dirección General de la Marina Mercante prácticamente ha finalizado las labores de limpieza en las escolleras, pero la regeneración de los bancos marisqueros, a cargo de la Consejería de Pesca, lleva un mes de retraso debido a la complejidad del proceso y al sustrato fangoso de esa ría, en donde los trabajos durarán unos cinco meses en lugar del mes escaso empleado en otras zonas. Toba estimó que la aportación de áridos a la ría ferrolana podría iniciarse en la primera decena de junio.