Toreo bajo la nieve

Torear en Utrera -a sólo 20 kilómetros de la Maestranza de Sevilla- tiene el inconveniente de que la mitad de los espectadores son expertos en materia taurina -cuadrillas, ganaderos, taurinos- y, convierten el espectáculo en una clase en la que un solo alumno recibe los consejos de muchos maestros. Los maestros no se callan, y tratan a los novilleros con familiaridad. Así, por ejemplo, a Joaquín Díaz., torero del lugar, le llamaban Cuqui y lo mareaban con advertencias múltiples. Entretanto, hacía un frío helador, soplaba viento y nevó.Joaquín Díaz miraba al tendido y se encontraba con. caras conocidas y respetables: "Sácalo", "párate", "crúzate" y todas esas cosas que suele decir la gente entendida a quien está delante del toro. A todo esto, el novillo, bravo y codicioso, iba y venía que era un primor. El torero, hecho un lío, alargó la faena, se lució en los adornos y dejó escapar una oportunidad de oro.

En el cuarto, miró menos al tendido y más al toro, un novillo con picante que exigía más atención. Toreó todo lo bien que sabe -que es mucho- con la mano derecha, y mostró la elegancia de un toreo largo, suave y sentido. Faltó que algún maestro le gritara: "La izquierda". Cuando Díaz se dio cuenta, ya estaban la faena y el toro vencidos.

Los maestros no se pusieron de acuerdo si hacía 40 o 42 años que no nevaba en Utrera. Lo cierto es que los copos comenzaron a caer cuando estaba en la arena el primer novillo de Rondino. El muchacho toreó con decisión y valentía. Consiguió que la gente olvidara la nieve y reconociera su brava lucha contra los elementos. En el peligroso quinto, Rondino -también utrerano- se jugó el físico y consiguió series de gran mérito.

Umbreteño, que no es de la localidad, se dedicó a torear con pinturería y con una técnica depurada. No brilló en su primero, pero doblegó la huidiza mansedumbre del sexto.

Cristina Sánchez, lesionada

Cristina Sánchez sufrió un puntazo leve en el mentón, que requirió seis puntos de sutura, en la corrida mixta celebrada ayer en Motril (Granada), con motivo del Día de Andalucía.Se lidiaron cuatro toros y dos novillos de Felipe Bartolomé, flojos. Emilio Silvera, oreja y aviso. Paquiro, vuelta y silencio. Cristina Sánchez, dos orejas y tres avisos.