Argel cree que los asesinos de Budiaf son los autores del atentado contra Nezzar
Los instigadores del asesinato del ex presidente Mohamed Budiaf, abatido el 29 de junio del año pasado, son los mismos que han atentado contra el ministro de Defensa, miembro del Alto Comité de Estado y hombre fuerte del régimen argelino, general mayor Jaled Nezzar. Tal es la conclusión a la que llega la mayoría de los periódicos y comentaristas políticos argelinos tras analizar las circunstancias y los medios que fueron empleados en el frustrado atentado. No obstante este aparente debilitamiento de la tesis de la autoría integrista, los islamistas siguen atacando al sistema. Ayer mismo tirotearon un minibús escolar no lejos de Argel.
En el atentado perpetrado en la mañana del sábado contra Nezzar se utilizaron explosivos de gran potencia y un complejo mando a distancia que permitió hacer estallar el coche bomba con total impunidad, lo que llama la atención de los analistas. Pero además, los autores del atentado conocían con toda precisión y de antemano el recorrido que debía de efectuar el coche de Nezzar, quien se desplazaba desde su domicilio en el barrio de El Biar a la sede del Ministerio de la Defensa, situado a poco menos de dos kilómetros.La revelación de estos datos sobre el atentado han permitido a la prensa argelina y a los observadores políticos establecer la hipótesis de que los autores del atentado son los mismos que el pasado mes de junio asesinaron en Anaba, a unos 600 kilómetros al este de Argel, al presidente Mohamed Budiaf. En opinión de los citados medios se trata de una acción perpetrada por profesionales que ha tenido que estar forzosamente planeada con mucha antelación. En Argelia se habla otra vez de la mafia político-financiera del anterior régimen como verdadera autora del atentado, aliada con casi total seguridad con los integristas.
Al hablarse de la mafia político-financiera, término acuñado por el propio Nezzar, la opinión pública argelina ha recordado que hace pocos días fue condenado a 15 años de cárcel por un delito de corrupción el general mayor Mostefá Belucif, máximo responsable de la Armada argelina desde 1980 a 1985 y que en su momento llegó a ser firme candidato a suceder al entonces presidente Chadli Benyedid.
Las corruptelas de Belucif fueron en su día investigadas por una comisión de cinco generales, entre los que se encontraba Nezzar, quien a la postre se ha convertido en sucesor, aunque: de forma colegiada con otras cuatro personas, del ex presidente dimitido.
Si no fuera esto suficiente, con la misma precisión que se perpetró el atentado contra Nezzar, y prácticamente a la misma hora, eran asesinados en el barrio de El Harrach, cuatro policías, entre ellos el jefe de la seguridad urbana de Argel, cuando se dirigían al Gobierno Civil de la provincia. El vehículo en que viajaban los funcionarios cayó en una emboscada, lo que permitió a los cinco miembros del comando actuar con rapidez, precisión y huir sin problemas.
Ayuda francesa
El doble atentado del sábado se perpetró mientras el ministro de Economía y Finanzas francés, Michael Sapin, efectuaba una visita relámpago a Argel, con el objeto de firmar el protocolo de diversas ayudas financieras, por un valor total de 6.000 millones de francos franceses (alrededor de 126.000 millones de pesetas). Se trata de un verdadero balón de oxígeno para el Gobierno argelino, que en los últimos meses ha logrado reconciliarse con Francia y hacer creer a París que el proceso de reconducción democrática llegará después de que se haya acabado con el integrismo.Ayer, mientras Argel recuperaba la normalidad, tras un día de tensiones, temores y atascos provocados por la lluvia y los controles policiales, llegaba a la capital nuevas informaciones relativas acciones terroristas. La más importante se produjo en Reghaia, a unos 35 kilómetros de la ciudad, donde un minibús que llevaba al colegio a hijos de gendarmes fue asaltado por integristas. Ninguno de los niños resultó herido, pero el conductor murió a causa de las heridas. Un ataque, que sin duda, volverá a herir y hacer crecer la ira entre las fuerzas de seguridad argelinas, convertidas en objetivo prioritario de esta escalada.
Tambiénm ayer, la policía dio cuenta de la muerte de tres presuntos terroristas islamistas en Bougara, 20 kilómetros al sur de Argel, y de la detención de otros 54 militantes islámicos en diversas acciones desarrolladas en los pasados días.
El primer ministro argelino, Belaid Abdesalam, declaró el jueves que en la lucha contra el extremismo integrista se había detenido en los últimos meses a 3.500 personas. Alí Yahia Abdenur, presidente de la Liga Argelina de los Derechos Humanos, ha declarado que la policía tortura a los integristas detenidos y que. él tiene en su poder información sobre 346 casos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.