Alardes jurídicos para dar salida a has objeciones de Dinamarca
La solución al problema planteado por Dinamarca puede dar mucho juego en el futuro en las cátedras de derecho político e internacional. Los expertos jurídicos están hilando tan fino que se hace dificil explicar a estas alturas en qué consisten las nuevas diferencias, después de que Dinamarca presentara de improviso ocho enmiendas más a la de por sí compleja fórmula hallada por los juristas de la Comunidad Europea (CE). No hay que olvidar que la frase del día fue "el filo de la navaja".El caso es que Londres distribuyó ayer el último documento, que deberán discutir en Edimburgo directamente los jefes de Estado y de Gobierno. Algunas enmiendas danesas han sido recogidas y algunas .Sugerencias de las otras partes han sido atendidas de forma un tanto curiosa. Uno de los problemas era un documento denominado "decisión". de los Doce y articulado como un tratado, cosa que podía llevar a tomarlo como lo que quería parecer: un tratado más que hay que ratificar de nuevo.
. Los británicos proponen dejar por decidir el nombre de la cosa. Por si acaso, recogen una enmienda de Dinamarca y donde se decía que los Doce "han decidido como sigue" se dice que "se han puesto de acuerdo en la siguiente decisión".
El resto del documento es también puro encaje de bolillos para ligar dos materiales incompatibles: un texto con valor jurídico y carácter vinculante, que consagre las cuatro excepciones en favor de Dinamarca (en defensa, moneda, ciudadanía y justicia e interior), y la exigencia de los otros de no renegociar el tratado y de evitar una Europa a la carta.
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