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El incierto futuro de Sendero Luminoso

Gustavo Gorriti

¿Qué va a pasar con Sendero Luminoso ahora que su rey-filósofo ha caído preso? Desde el punto de vista operativo, tanto la fuerza como la mayor vulnerabilidad de Sendero Luminoso residían y residen en la concentración del liderazgo en Guzmán. A diferencia de otros partidos comunistas ortodoxos, donde el culto a la personalidad se desarrolló tras la toma del poder, en Sendero Luminoso la adoración a Guzmán se dio desde los años previos al inicio de su levantamiento armado, y adquirió ribetes extravagantes durante los años de la guerra. Para explicarse la importancia del liderazgo de Abimael Guzmán en Sendero Luminoso, y tener así alguna idea sobre las consecuencias posibles de su arresto para la insurrección senderista, es necesario buscar antecedentes tanto en los partidos comunistas ortodoxos, como en algunos movimientos integristas, especialmente los musulmanes, que siempre fascinaron a Guzmán.La comparación con los movimientos fundamentalistas se hace necesaria, porque aunque Sendero Luminoso (es decir, el Partido Comunista de Perú) es esencialmente un movimiento comunista ortodoxo, la intensidad del culto a su líder le confiere características cuasi religiosas.

No sólo en la clandestinidad, sino desde antes del inicio de la insurrección armada, el liderazgo de Guzmán asumió contornos y dimensión de culto. Gonzalo, el seudónimo de combate de Guzmán, extraía su liderazgo no sólo de su capacidad de dirigir el partido, sino también de identificar el denominador común de la realidad y articularlo con las leyes que rigen la marcha de la historia, incluyendo el papel de los individuos y de sus voluntades.

Sendero vio paulatinamente en Guzmán al único ser viviente en este planeta con la capacidad de interpretar las leyes generales de la historia y hacer actuar a su partido en consecuencia. Los sobrenombres admirativos que le pusieron sus discípulos siempre estuvieron más relacionados con la taumaturgia intelectual que con la capacidad militar o la organizativa. Él fue el docto puka inti (sol rojo) para los suyos durante los años de lucha y reclutamiento en la universidad de Huamanga. Y fue también el doctor champú, el que lavaba cerebros.

Finalmente, sus seguidores identificaron, sus supuestos aportes al marxismo-leninismo-maoísmo en un conjunto orgánico al que llamaron, primero, el pensamiento-guía del camarada Gonzalo, y que después ascendió a convertirse en el pensamiento Gonzalo. Es decir, utilizando el lenguaje preciso del dogma, lo que antaño fuera el pensamiento Mao Zedong fue convertido por ellos en maoísmo puro y simple, más tarde denominado gonzalismo.

Culto a la personalidad

A medida que su clandestinidad hacía crecer el mito y sus planes y estrategias se cumplían con aparente inexorabilidad, el culto a Gonzalo empezó a adquirir una dinámica propia y a perder hasta la proporción del exceso. Los nuevos militantes del partido tenían que escribirle una "carta de sujeción" en la que declaraban la disposición a dar la vida no sólo por el partido y la revolución lino también por él.Los eslóganes, repetidos. con precisión y persistencia interminables, le describían como el más grande marxista viviente. Pero luego eso no resultó suficiente y se le llamó el más grande producto de la materia viviente. Todo senderista proclamaba llevar la vida en la punta de los dedos, lis to para entregarla a. Gonzalo, arrebatados en muchos casos por visiones de fuego y de entre ga trascendentes, en cuyo momento "la dirección" iba a estar a su lado.

Sin embargo, junto a la tanatofilia mística, Sendero siguió desarrollando con frialdad la ingeniería de demolición social, combinando la perspicacia estratégica con la absoluta falta dé escrúpulos que sólo el fanatismo excluyente logra mantener con consistencia.

¿Qué sucede entonces cuando cae la abeja reina? Hoy la desolación sucede al estupor en las filas senderistas. En ellas, el impacto de la captura de Abimael Guzmán se multiplica tanto por la sorpresa como por la rapidez del trastocamiento de posiciones. Hasta hace muy pocos días, Sendero mantenía con claridad la iniciativa estratégica. Desde la perspectiva urbana, su avance en los pueblos jóvenes, en las villas-miseria que secundan la capital, Lima, encontraba una resistencia disminuida, y los dirigentes populares que se atrevían a enfrentarlo eran cada vez más valientes y cada vez más escasos.

Pero una sola acción policial fulgurante ha tornado la seguridad en estupor y la certeza de poseer el futuro en el temor de naufragar en el pasado.

¿Podrá recuperarse Sendero de este contraste central?

Las pocas referencias históricas válidas sugieren interpretaciones diferentes. De un lado, los movimientos insurreccionales maoístas que perdieron a su líder durante la etapa inicial o en medio de la insurrección se desintegraron (como sucedió en la India), fueron destrozados en combate (el Sarbedarán en Irán), o se distorsionaron y quedaron finalmente a la deriva (caso del EPL en Colombia).

Partidos comunistas

En el caso de todos los partidos comunistas que lograron conquistar el poder por esfuerzo propio, el líder central se mantuvo vivo y libre a lo largo de la lucha. Tito o Mao corrieron grandes peligros, pero se mantuvieron en el liderazgo de la guerra hasta su fin. Ho Chi Minh estuvo preso, pero no en su país, sino en China, y por un periodo relativamente corto que afectó duramente a su partido.

Si estos ejemplos muestran alguna pauta, la captura y prisión de Guzmán tendría un efecto por lo menos corrosivo y probablemente demoledor sobre Sendero.

Pero, de otro lado, también cabe la posibilidad de que el elemento integrista secular que hay en Sendero origine una visión religiosa de la prisión de Guzmán y produzca el mismo efecto que tuvo, por ejemplo, para Hezbolá (Partido de Dios) en Líbano, el secuestro y la desaparición de su imán en Libia. Hezbolá se fortaleció y la ausencia del imán resultó finalmente más eficaz que su presencia.

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