La aptitud para las matemáticas no depende del sexo

., Los alumnos de matemáticas producen más, es decir, resuelven mayor número de problemas matemáticos en un tiempo dado, pero sus compañeras de estudios son más eficaces, ya que presentan más resultados correctos. Ésta es la conclusión de una investigación llevada a cabo con 403 niños entre 13 y 14 años de ambos sexos por la psicóloga María Pérez, de los Equipos Interdisciplinarios del Ministerio de Educación, y que ha sido presentada en el Congreso Iberoamericano de Psicología, celebrado recientemente en Madrid. Según María Pérez, las niñas rinden menos cuando se aumenta sensiblemente el nivel de dificultad de la tarea matemática. "Los niños, en cambio, cometen más errores si se reduce el tiempo para solucionar la tarea", añade.Las diferencias al enfrentarse con el estudio de las matemáticas, una de las asignaturas "duras" en la enseñanza española, existen pero "se deben a factores socioeducativos" afirma Isaac Garrido, profesor de psicología de la Universidad Complutense de Madrid. En su opinión, la explicación a las diferencias debe buscarse en los factores psicosociales y educacionales que inciden en el desarrollo de los niños. "Si bien las cosas han cambiado bastante, se mantiene un sesgo social desde el entorno familiar, por el que no se espera que las niñas se inclinen por la ciencia tanto como los niños", afirma.

Un equipo de psicólogas de la Complutense y profesoras de la Escuela de Ingenieros de Caminos de Madrid también han llegado a la conclusión de que la aptitud para las matemáticas no varía por sexos. Las pruebas realizadas a 1.759 niños y niñas, de edades comprendidas entre los 13 y los 16 años, muestran que no hay diferencias significativas, "salvo en el razonamiento abstracto, donde las niñas son mejores", explica Ana Salvador, que presentó los resultados de la investigación en el mismo congreso.

Por otra parte, los psicólogos consultados coinciden en señalar que es necesario un cambio metodológico en la enseñanza de la asignatura para hacerla apetecible y menos temida.

Para Ana Salvador, la supuesta dificultad de las matemáticas es un mito: "El problema es metodológico, hay que hacerlas atractivas para los alumnos". En opinión de Carmen de Veiga, miembro de la Sociedad de Profesores de Matemáticas de Madrid, las matemáticas se enseñan con un nivel excesivo de formalización: "El enfoque debe ser más práctico, para que los alumnos vean que sirven para resolver problemas de la vida cotidiana".