El objetivo es avanzar
El objetivo de la cumbre de Lisboa es "asegurar que la Comunidad sigue avanzando y que habrá una solución definitiva sobre las perspectivas financieras en el Consejo Europeo de diciembre en Edimburgo", dijo Jacques Delors. Para ello, el presidente de la Comisión Europea planteó ayer siete preguntas, a las que Ios Doce tienen la obligación de responder", referidas todas ellas a la puesta en marcha de los compromisos asumidos en Maastricht. La cohesión "es el tema más grave", dijo, pero la solución que se apunta representa un paso atrás en relación con el llamado paquete Delors II.
En aras de un acuerdo, Delors propuso congelar dos años el tope del presupuesto actual y retrasar el aumento de los recursos de la CE (del 1,2% al 1,37% del producto interior bruto de los Doce) de 1997 a 1999. En ese caso, la duplicación prometida de las ayudas a los cuatro países más pobres se retrasaría dos años, aunque "esta propuesta no es la factura a pagar por Maastricht y esa cifra tendremos que demostrársela a los países escépticos".