San Sebastián, zona catastrófica

El Ayuntamiento de San Sebastián solicitará la declaración de zona catastrófica para la ciudad por los cuantiosos daños ocasionados por las fuertes lluvias caídas el martes sobre la capital guipuzcoana. En una primera evaluación de los daños provocados por el agua, el coste de los destrozos en bienes públicos y privados supera con creces los 2.000 millones de pesetas. Un total de 161 vecinos fueron evacuados de sus casas y se encuentran alojados en distintos hoteles y pensiones de la ciudad. Varios bloques de viviendas de los barrios de Sagües, Amara Viejo y Eguía corren peligro de derrumbamiento al encontrarse asentados en las laderas de los montes Ulía y de San Bartolomé.

El alcalde de San Sebastián, el socialista Odón Elorza, cree que los daños que se han producido en la ciudad superarán la cantidad ofrecida tras la primera evaluación de los daños por parte del representante del Consorcio de Compensación de Seguros.Los bienes públicos y privados afectados por la virulencia de las aguas han sido numerosos y se encuentran repartidos por toda la ciudad, según indicó Odón Elorza.

Los efectos de la tromba de agua, la mayor que se recuerda en los últimos 50 años, se agravaron debido a su coincidencia con la pleamar, ya que la subida de la marea del Cantábrico llegó a su punto más alto justo en el momento en que la tromba se abatía con mayor intensidad sobre la ciudad.

Las conducciones de la red sanitaria de las zonas situadas en las proximidades del río Urumea se anegaron y contribuyeron a inundar los barrios de la ciudad en los que se encuentran localizados la mayor parte de los bajos y locales comerciales.

Las torrenteras que se precipitaban desde el monte Ulía, donde se produjeron también desprendimientos de tierra y piedras, llenaron las alcantarillas y los sumideros de agua, que reventaron saturados por el agua.

Agua por el salón

En tres bloques de viviendas pegados a la ladera del monte Ulía, en el barrio de Sagües, el agua entraba por las ventanas traseras del inmueble y salía por delante del edificio, tras atravesar las dependencias de las viviendas. Las 25 familias que residen en esos pisos tuvieron que ser evacuadas urgente mente y trasladadas provisionalmente a otros alojamientos alternativos.Los vecinos de esa zona responsabilizan al Ayuntamiento de la capital de la situación en la que se encuentran, ya que aseguran que el municipio se ha negado a dar soluciones a los problemas que vienen padeciendo desde hace ya varios años. Piden, además, la rehabilitación urgente de sus viviendas y la elaboración de un plan especial para evitar que se reproduzcan estas situaciones cuando el agua vuelva a caer con la misma intensidad. Otras 25 familias tuvieron que ser desalojadas de sus pisos en la calle del Easo al venirse abajo uno de los muros de contención del monte San Bartolomé y agrietarse otro.

Los técnicos municipales están estudiando la posibilidad o no de que los bomberos puedan entrar en los edificios para sacar la ropa y la documentación que los inquilinos tienen en el interior de las viviendas que tuvieron que desalojar precipitadamente.

Las lluvias se llevaron por delante decenas de coches que se encontraban estacionados en la calle, después de haber arrastrado los que estaban en garajes y aparcamientos subterráneos.

Algunos conductores tuvieron que ser rescatados de sus vehículos, que quedaron bloqueados por las torrenteras de agua. Los buceadores de la Cruz Roja tuvieron que emplearse a fondo para evacuar a los atrapados y trasladarlos a un lugar seco en lanchas neumáticas.

Los daños que se han ocasionado en establecimientos comerciales no se han evaluado hasta el momento como tampoco los perjuicios sufridos en entidades bancarias del barrio de Gros, otra de las zonas más afectadas.

Declaraciones flotando

Entre los documentos que el martes estaban flotando cerca de los bancos ubicados en esa zona se encontraban las declaraciones del impuesto de la renta de las personas físicas de un importante número de contribuyentes.Los responsables municipales acordaron iniciar en la mayor brevedad de tiempo los tramités necesarios para solicitar al Gobierno la inmediata declaración de zona catastrófica para la ciudad.

El alcalde de la capital guipuzcoana señaló ayer la existencia de dificultades para que la Administración central emita el informé de declaración de zona catastrófica. "Es compleja de conseguir pero, de todas las maneras, lo intentaremos", indicó Odón Elorza.

Numerosos vecinos se acercaron ayer hasta la sede del Ayuntamiento para solicitar información sobre los tramites que tienen que realizar para solicitar compensaciones por los destrozos causados en sus propiedades por la tromba de agua. Durante la jornada de ayer se registraron lluvias intermitentes en toda la provincia de Guipúzcoa y en algunas zonas de Vizcaya.