_
_
_
_
CINE

Obra de cámara

Poco conocido en España y no demasiado apreciado por la crítica, no cabe duda de que Michel Deville es uno de los grandes del actual cine francés. De manera callada, poco a poco, a lo largo de más de treinta años de trabajo continuado, no sólo se ha convertido en un garn técnico, sino en un realizador personal con una importante obra a sus espaldas.Durante los años sesenta rueda una docena de películas sobre guiones escritos en colaboración con Nina Companeez, que le convierte en un buen especialista en comedias. Tienen más interés las primeras y más personajes Esta noche o nunca (1960), Por culpa de una mujer (1962) o Lapartement des filles (1963), pero sus grandes éxitos de estos años son Benjamin (1967), Bye, bye Barbara (1968), La muñeca y el bruto (1969) y Rafael el libertino

Nuit d`eté en ville

Dirección: Michel Deville. Guionista: Rosalinde Deville. Fotografía: Bernard Lutíc. Intérpretes: Jean-Hugues Anglade, Marle Trintignant. Francia, 1990. Estreno en Madrid: Renoir (versión original).

En la segunda parte de su carrera coexisten comedias en una línea similar, como La dama de azul (1972) o El trepa (1973), con policiacos que le dan un gran prestigio, como Le dossier 51 (1978), Eaux profondes (1981), sobre la novela de Patricia Higsmith, y Peril en la demeure (1981). Sin olvidar relatos con un marcado carácter literari o, como Le voyage en douce (1979), La paltoquet (1986) y La lectora (1988), una de las pocas películas del último periodo de su obra estrenada en España.

Noche de verano en la ciudad enlaza directamente con estos relatos de subrayado carácter literario, lo que podría denomianerse "cine de cámara", en trasposición del término "música de cámara". Está basado en un argumento original de Rosalinde Deville y muestra el enfrentamiento entre una pareja, Louls y Emile, que acaba de conocerse y de hacer el amor, en un único decorado, un típico piso parisiense, durante unas horas de una noche, casi en tiempo real.

Poco después de conocerse, Emile lleva a Louis a su piso y, tras copular, hablan de lo que pueda ser su posible vida en común, desnudos, semidesnudos, mientras pasan de una habitación a otra, lejos de cualquier trascendencia, dentro de una conversación de lo más normal.

El resultado es un duelo interpretativo, un diálogo entre dos cuerpos, que demuestra que Jean-Hugues Anglade es un gran actor, muy conocido y apreciado en Francia, pero casi desconocido entre nosotros, y que Marie Trintignant es un hermoso proyecto de actriz que sabe defender bien su personaje. Al tiempo que confirma a Michel Deville como un gran director de actores.

El máximo atractivo de Noche de verano en la ciudad, de esta obra menor, clara muestra del

cine de cámara" que le gusta cultivar a Deville de cuando en cuando, es tanto la calidad interpretativa como la discreción de la realización. Un juego de cámara que apenas se hace notar, que se limita a recoger la acción y subrayar algunos aspectos de ella, dentro de la discreción general de la película.

Esto lleva, a pesar de que Noche de verano en la ciudad es un texto fluido que fácilmente podría representarse sobre un escenario, a que no resulte nada teatral, poco tenga el común con lo que en tiempos se llamaba "teatro filmado" y en todo momento quede muy claro su tono cinematográfico, la sabiduría del hombre responsable de la película, de un Michel Deville que debía visitar más las pantallas de los cinematógrafos españoles.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_