Un complejo entramado de leyes e intereses frena el comercio del libro iberoamericano
Sanguinetti propone la unificación de criterios en torno a los derechos de autor
Los principales problemas que frenan el comercio de libros entre las naciones de Iberoamérica son la falta de información bibliográfica entre los países y las copias ¡legales, sobre todo de volúmenes científicos, que infrigen los derechos de autor, según pusieron ayer de manifiesto los participantes en la primera Conferencia Iberoamericana del Libro, inaugurada en Granada. El presidente de la conferencia y antiguo presidente de Uruguay, Julio María Sanguinetti, propuso la unificación, pese a la compleja trama que mueve a duras penas el comercio internacional del libro, de los criterios sobre derechos de autor, aranceles, distribución y política de bibliotecas de cada uno de los países de habla española y portuguesa.
Sanguinetti recordó que la reunión de Granada es el resultado de un esfuerzo sostenido de Iberoamérica para la promoción del libro y la cultura que comenzó hace años con la firma de un acuerdo "parcial". de circulación del libro en América Latina. El propio Saguinetti confesó que la tarea no es fácil, pues el tratamiento del libro como producto comercial se guía por normas desiguales que impiden un intercambio regular. Federico Ibáñez, director General del Libro y Bibliotecas de España, manifestó que no existe ningún mecanismo de coordinación que permita conocer las novedades bibliográficas de cada país.La creación de una base de datos a la que accedan los editores, bibliotecas, distribuidores, libreros y lectores iberoamericanos es una de las aspiraciones más significativas de la conferencia de Granada, que reúne a todas las personas que intervienen en la tarea de producción del libro.
La piratería
Federico Ibáñez y Julio María Sanguinetti coincidieron en que la piratería es otro de los impedimentos que perjudican la importación de publicaciones y reduce las ventas hasta el extremo de convertir a las bibliotecas públicas en los clientes exclusivos de determinadas ediciones de carácter científico que circulan entre los lectores mediante la reproducción ilegal. El director del Libro recordó la importancia de la próxima aprobación de la reforma de la ley de la Propiedad Intelectual española [aprobada ayer por el Senado y pendiente del Congreso].
Federico Ibáñez agregó que la ampliación del mercado internacional del libro pasa obligatoriamente por el reconocimiento por parte de la Comunidad Europea del español y el portugués como los idiomas de intercambio con América Latina. Ibáñez agregó que muchos autores hispanoamericanos se han dado a conocer en Europa a través de España, lo que subraya la importancia de este reconocimiento por parte de la CE.
Sanguinetti expresó la necesidad de "generalizar los sistemas" que regulan la venta de libros ya que en ciertos países la existencia de viejos aranceles que gravan la importación son los que están coartando la necesaria expansión del mercado bibliográfico. De aquí al viernes, los asistentes a la conferencia debatirán asuntos relacionados con la reprografía, los derechos de autor, los incentivos económicos de los Gobiernos para promover el intercambio, la unificación de los hábitos de lectura y el funcionamiento de las bibliotecas. "Vamos a confrontar y a analizar las experiencias particulares de cada país para fertilizar el pensamiento y crear una conciencia común que más tarde tendrá una traducción política y social", explicó Sanguinetti.
De hecho, los organizadores de la reunión creen que la oportunidad del encuentro reside en que en los últimos años "acontecimientos de carácter político y económico han afectado profundamente el desarrollo de la industria editorial latinoamericana". En los primeros años de la década de los ochenta se agudizó la crisis económica de muchos de los países del área, lo que repercutió directa y determinantemente en el intercambio y el flujo de libros y publicaciones, principal vehículo de comunicación en el área cultural". Esta preocupación fue la que inspiró "un espíritu de cooperación que se ha manifestado de forma muy variada". Esta relación se quiere concretar tras la conferencia de Granada en la apertura de "una nueva línea permanente que suponga, cada dos años, un punto de encuentro en el que se discutan los problemas que afectan al mundo del libro y se diseñen políticas de actuación que comprometan las acciones gubernamentales".
Pese a la penuria del mercado editorial, las exportaciones de España hasta mayo de 1992 han aumentado respecto a un año antes en un 29.58%, según la Dirección General del Libro.
Babelia
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