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Prestan declaración los implicados en el robo de obras de arte en Granada

El titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Granada tomó ayer declaración durante toda la mañana al escritor y dramaturgo José Heredia Maya y, a partir de las 13 horas, al ex director del servicio de urgencias del hospital Clínico de Granada, Juan Moll, que fueron detenidos por la Guardia Civil el pasado domingo como presuntos inductores en el robo de obras de arte guardadas en un vivienda propiedad del Ayuntamiento de la ciudad situada en el barrio del Albaicín. A la hora de cerrar esta edición el juez aún no había decidido sobre la situación de libertad de ambas personas.

José Heredia llegó al juzgado después de las 10 horas y tras una larga declaración el magistrado decidió confrontar sus palabras con la de las cinco personas que permanecen en prisión desde hace dos semanas acusados de ser los autores materiales del asalto y robo a la vivienda municipal. El primer careo, entre el escritor y María del Mar Matilla, fue muy violento. La mujer dijo al juez que el escritor y el médico estaban directamente relacionados con el asalto. Ambos negaron esta circunstancia.

Careo con los encarcelados

Con posterioridad fueron llamados uno a uno el resto de los individuos encarcelados, entre ellos Antonio Martín Franco, que tuvo que ser detenido por dos veces por la Guardia Civil después de que burlara la vigilancia de un agente cuando ambos procedían a comprobar un registro. El juez decidió que se sumara al careo el médico Juan Moll, conocido coleccionista de arte. El juez mantiene el secreto sumarial, lo que aumentó los rumores acerca de la implicación de una tercera persona que podría tener alguna responsabilidad pública. Este extremo no pudo ser confirmado. El asalto al carmen de los Mínimos se produjo la noche del 3 de mayo. Poco después, los presuntos ladrones visitaron la vivienda de Juan Moll y le ofrecieron siete obras de arte. Moll llamó a José Heredia y ambos pagaron a cambio 100.000 pesetas. Según la tesis que mantienen ambos, decidieron comprar los cuadros después de que reconocieran su procedencia ilegítima con el objetivo de impedir la dispersión del patrimonio municipal.

Después de adquirir los cuadros, Moll se puso en contacto con el gobernador civil de Granada, Gerardo Entrena, con el que mantiene cierta relación de amistad o conocimiento.

El Ayuntamiento de Granada no llegó a poner denuncia por la desaparición, ya que los guardias que hacían rondas cada dos horas por la vivienda no se percataron de nada anormal. Fue la Guardia Civil la que informó a los servicios municipales sobre el suceso. El especialista en arte Eduardo Quesada ha sido comisionado por el juez para que haga una tasación de las 46 obras de arte recuperadas, siete en poder de Moll y el resto en la vivienda de los supuestos ladrones. De momento se ignora a cuánto podría ascender el importe de lo robado.

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