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La CE reconoce su necesidad de invertir más en investigación para mejorar la competitividad

Europa está cambiando sus programas de ayuda a la investigación para adaptarse a lo acordado en el Tratado de Maastricht y para compensar la continua pérdida de competitividad de su industria frente a Japón y EE UU. Algunos de los máximos responsables de investigación y desarrollo en la Comunidad Europea coincidieron ayer en Sevilla en la necesidad de conseguir una cooperación eficaz entre los tres órganos comunitarios -Comisión, Consejo de Ministros y Parlamento , de establecer un puente estable entre ciencia e industria y de dedicar más dinero a la investigación.

La IV Conferencia del programa Brite-Euram de la CE fue el pretexto para que la Europa de la investigación se diera cita en Sevilla ayer, con la presencia del ministro español de Educación y Ciencia, Javier Solana, y de unos 700 investigadores, empresarios y expertos en política científica. Es la primera vez que esta reunión en la que participan los 12 países de la CE además de Suiza y Checoslovaquia, se celebra fuera de Bruselas, con la excusa de la Expo 92, de cuyo programa forma parte.Hasta el miércoles, la conferencia correrá en paralelo con la reunión en Sevilla del Comité de Energía, Investigación y Tecnología del Parlamento Europeo, que preside el eurodiputado socialista belga Claude Desama. El Parlamento Europeo, explicó Desama ayer, tiene a partir de ahora un mayor poder sobre la política de ciencia y tecnología comunitaria, ya que es un órgano de codecisión, aunque sus propuestas deben ser aprobadas por unanimidad en el Consejo de Ministros. "Esto puede dar lugar a bloqueos, pero estamos intentando que no se produzcan, negociando ya el cuarto programa marco de investigación y desarrollo de la CE con la comisión", señaló Desama.

Cohesión tecnológica

La cohesión debe afectar a todas las áreas y no sólo a los fondos estructurales, según Solana, quien señaló ayer que la homogeneidad no debe significar pérdida de excelencia en la investigación que se realice en Europa. Sin erribargo, "la cohesión en todas las políticas comunitarias debe dar posibilidades a las zonas con menor desarrollo tecnológico por razones históricas", afirmó Solana. "Maastricht ha modificado las reglas de juego al resaltar la ¡mportancia estratégica de la competitividad industrial basada en la investigación y desarrollo propios", señaló Filippo Maria Pandolfi, vicepresidente de la Comisión.

Los proyectos de Brite-Euram, el programa resultado de: la fusión de dos anteriores y dedicado a la investigación precompetitiva en el sector industrial, abarcan muchos campos, como se puede ver estos días en la exposición paralela a la conferencia. Un método de tratamiento hidrometalúrgico de mineral de azufre, liderado por el Centro de Investigaciones Metalúrgicas del CSIC, es uno de los 12 proyectos considerados ejemplares por los responsables del programa Brite-Euram, entre los 300 terminados. Otros abarcan desde un láser para soldar metales a nuevos usos de los cristales líquidos, una fábrica automatizada de zapatos, un motor con numerosas partes plásticas y el desarrollo de un vaso sanguíneo artificial hecho con una mezcla de plástico y células humanas.

De 1987 a 1991, 201 grupos españoles participaron en 142 proyectos del programa Brite-Euram, de: los cuales lideran 25. El presupuesto alcanzó los 9.000 millones de pesetas, la mitad de los cuales fueron financiados por la CE. Entre las empresas españolas que lideran proyectos están Ona-Electroerosión, Ensidesa, Initec, IDS, CASA, Dymsa, Teckniker, Fatronik y Dye.

Pero Brite-Euram tiene problemas de orientación, como la mayoría de los programas de I+D de la CE. Su solapamiento con el programa Eureka, nacido fuera de la CE, es evidente. "La semana pasada en Finlandia acordamos con Eureka [que celebraba su reunión anual] que la CE financiará de forma creciente los proyectos considerados clave en la parte precompetitiva", sefialó Pandolfi al referirse a este problema. También se ha incluido en su última convocatoria la investigación sobre materias primas, el reciclado y la aeronáutica. El vicepresidente de la CE anunció la creación de un fondo de capital riesgo destinado a las pequeñas y medianas empresas para que inviertan en innovación.

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