Siria no logró romper el bloqueo

Siria no ha podido, a pesar de sus esfuerzos, romper el embargo aéreo decretado desde el 15 de abril por las Naciones Unidas contra Libia. El avión de la Syrian Arab Airlines que tenía previsto volar ayer desde Damasco hasta Trípoli tuvo que quedarse en la pista de la capital siria, al negarse varios países a permitirle el tránsito por sus espacios aéreos con dirección a Libia.En Nicosia, el director de la Aviación Civil, Mikhalis Erodotu, confirmó que las autoridades locales habían comunicado a las de Damasco que "Chipre aplica la resolución 748 de las Naciones Unidas" (la que ordena el embargo). Una fuente aeronáutica de la isla confirmó que Grecia y Egipto habían tomado una decisión semejante, lo que no dejaba al aparato ninguna posibilidad de corredor aéreo alternativo.

Los responsables de la compañía aérea siria no tuvieron más remedio que hacer público ayer por la tarde un comunicado en el que reconocían que, en estas condiciones, el vuelo había tenido que aplazarse "hasta una fecha indeterminada".

Desde el anuncio del embargo, el Gobierno sirio no se había pronunciado oficialmente sobre su voluntad de aplicarlo o no. La radio de Damasco, sin embargo, había hecho un llamamiento al mundo árabe, en la víspera del embargo, a no acatarlo. El domingo, la agencia oficial siria, Sana, había asegurado que Libia podía contar con el apoyo de Siria "frente a todos los peligros".

Viaje de Asad

El propio presidente sirio, Hafez el Asad, está intentando forjar una postura común de los Gobiernos árabes frente a la crisis. El mandatario llegó ayer por la tarde a Kuwait, donde está previsto que se reúna con el príncipe Jaber al Ahmed al Sabaj.

Se trata de la segunda etapa de una gira que empezó por Arabia Saudí. Asad se había entrevistado el domingo por la noche en Riad con el rey Fahd, quien lo recibió acompañado por el príncipe heredero y el ministro de Defensa.

Después de su etapa kuwaití, que debe durar sólo "unas horas", el jefe de Estado sirio visitará también Bahrein y los Emiratos Árabes Unidos. Aunque la comitiva siria no ha hecho comentarios sobre los objetivos concretos de esta gira, la prensa de Damasco subrayaba ayer que se trataba de llegar a un "acuerdo común" entre los árabes, basado en la idea de que "el derecho internacional es uno sólo e indivisible".

Esta posición la resumía ayer el periódico oficial sirio, Al Baath, al subrayar la existencia de "grandes peligros" que se avecinan tras el establecimiento del nuevo orden mundial. "La mayor parte de los acontecimientos que suceden en el mundo de hoy parecen dirigidos contra los árabes mucho más que contra cualquier otro pueblo", recalca el diario. Y añade: "Lo más importante sería que los árabes tomaran conciencia de hacia dónde van, qué intereses defienden y cuál es su objetivo. Lo que se avecina es muy peligroso, mucho más de lo que la gente se imagina".